Defensa

Taiwán saca músculo con el lanzamiento de un nuevo buque de guerra

La isla busca convertirse en proveedor de armas para Occidente

La presidenta de Taiwán Tsai Ing-wen durante la presentación
La presidenta de Taiwán Tsai Ing-wen durante la presentaciónRITCHIE B. TONGOAgencia EFE

Taiwán puede convertirse en un proveedor de armas para las democracias occidentales, dijo el martes la presidenta Tsai Ing-wen, elogiando la capacidad mejorada de diseño de armas de la isla al lanzar un buque de guerra avanzado cargado de misiles y encargar un nuevo minador.

Tsai ha hecho del impulso de la defensa de la isla reclamada por China una prioridad frente al creciente desafío militar de Pekín, que nunca ha renunciado al uso de la fuerza para poner bajo su control al Taiwán democrático.

Si bien la fuerza aérea de Taiwán se ha beneficiado de F-16 nuevos y mejorados, la marina es el próximo enfoque de Tsai, con la producción de submarino y el lanzamiento el martes de la primera de una flota de corbetas altamente maniobrables. Las nuevas corbetas de la clase Tuo Chiang, un prototipo de las cuales ya está en funcionamiento, han sido apodadas por la armada de Taiwán como el “asesino de portaaviones” debido a su complemento de antimisiles. También puede transportar misiles antiaéreos Sky Sword.

En la ciudad portuaria oriental de Suao para el lanzamiento del Ta Chiang, el primer barco de producción en masa de la clase TuoChiang, Tsai dijo que el barco y el nuevo minador disuadirían los ataques y muestra la investigación y la capacidad de desarrollo de Taiwán. “Tenemos la determinación y la capacidad para completar la tarea de construir nuestros propios barcos, dejando que el mundo vea nuestra capacidad de investigación y desarrollo de defensa”, dijo Tsai. “En el futuro, también podemos convertirnos en una fuente de suministro de equipos y componentes relacionados para las democracias occidentales, impulsando la mejora de la industria de defensa”, dijo.

Estados Unidos es el principal proveedor extranjero de armas de Taiwán. La mayoría de los países evitan armar a la isla, temen molestar a Beijing y perder valiosos contratos comerciales con la segunda economía más grande del mundo. Tsai, reelegida aplastantemente en enero con el compromiso de enfrentarse a China, ha defendido el concepto de “guerra asimétrica”, centrándose en armas móviles de alta tecnología diseñadas para hacer que cualquier ataque chino sea lo más difícil posible. Ha reforzado la industria nacional de armas para tratar de que Taiwán sea lo más autosuficiente posible.