¿Quién es el miembro “racista” de la familia real británica qué cuestionó el color de piel de Archie?

La familia real británica se encuentra bajo una enorme presión tras las recientes acusaciones de racismo vertidas por Meghan Markle y el príncipe Harry contra el palacio de Buckingham, un escándalo que amenaza con sumir a la monarquía en su peor crisis en décadas.

Y es que la demoledora entrevista que los duques de Sussex concedieron a la estrella de la televisión estadounidense Oprah Winfrey ha conmocionado a Reino Unido, en particular a la prensa, que este martes busca identificar al miembro de la familia real británica que cuestionó el color de piel del hijo de la pareja, Archie, de casi 2 años de edad.

La pareja explicó en detalle durantela entrevista grabada en Los Ángeles -donde residen ambos- los motivos que les llevó a apartarse de la monarquía hace un año, así como los pensamientos suicidas de Meghan y la falta de ayuda por parte de la familia real.

Más escándalos en palacio

Muchos escándalos ha tenido que afrontar ya la reina Isabel II con su familia en sus casi 70 años de reinado, como la crisis matrimonial de los príncipes de Gales en 1992, pero la polémica en torno a los duques de Sussex va más allá de asperezas familiares al abordar el racismo.

Como mestiza que es, Meghan se sintió víctima de continuos ataques racistas por parte los tabloides sensacionalistas y de una monarquía demasiada encorsetada para el siglo XXI pero que representa a varios países de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth) con poblaciones de distintas razas.

Algunos periódicos comparan esta crisis con la abdicación del rey Eduardo VIII en diciembre de 1936, para casarse con la divorciada estadounidense Wallis Simpson, en lo que supuso el punto más bajo de una institución con más de mil años de historia.

El padre de Meghan niega las acusaciones

Thomas Markle, padre de la duquesa de Sussex, con la que no mantiene vínculo, admitió sentirse “decepcionado” por la entrevista y negó que la familia real británica sea racista. La relación entre ambos se rompió después de que Thomas hablase con la prensa antes de la boda de la pareja, celebrada en 2018 en el castillo de Windsor (a las afueras de Londres).

“Tengo un gran respeto por los ‘royals’ y no creo para nada que la familia real sea racista. No creo que los británicos sean racistas”, insistió el padre de la duquesa de Sussex en declaraciones a la cadena ITV. “Quiero mucho a mi hija. De haber sabido que tenía problemas psicológicos, la hubiera apoyado”, añadió.

A la caza del “racista”

Los medios británicos han pedido identificar al miembro de la familia real que al parecer manifestó la inquietud por el color de la piel de Archie Mountbatten-Windsor, después de que Isabel II y su marido, el duque de Edimburgo, hayan quedado descartados.

“Meghan y Enrique: a la caza para identificar al miembro de la familia real que hizo un comentario racista sobre Archie”. “Exigimos saber quién es el racista”. “¿Quién en la familia real cuestionó el color de la piel de su futuro hijo?”. Estos son algunos de los titulares que los periódicos británicos dedican a la crisis.

No obstante, algunos diarios recordaron este martes el escándalo que el mismo príncipe Enrique, nieto de Isabel II, provocó en Reino Unido en 2005 cuando fue fotografiado en una fiesta disfrazado con el uniforme nazi y la esvástica en el brazo.

El Partido Laborista, primero de la oposición, ha pedido investigar las acusaciones de presunto racismo en la monarquía. Según el diario “The Times”, la reina Isabel II se negó el lunes a firmar un comunicado que los funcionarios del palacio de Buckingham habían preparado y pidió más tiempo para evaluar el escándalo antes de responder al contenido de la entrevista.

Los duques, que serán padres de una niña este verano, también dijeron que algunos miembros de la familia real no querían que su hijo fuera príncipe y que el príncipe de Gales dejó de responder a las llamadas de su hijo Enrique.