Boris Johnson: “Haré todo lo que pueda para que la Superliga no salga adelante”

El primer ministro británico, Boris Johnson, se comprometió este lunes a “hacer todo lo que pueda” para evitar que el proyecto de la Superliga europea de fútbol “salga adelante como está planeado”. “Vamos a mirar todo lo que podemos hacer con las autoridades del fútbol para asegurarnos de que esto (la Superliga) no sale adelante como está planeado”, dijo en declaraciones a los medios Johnson, que ya anoche manifestó su oposición a la idea. Para el “premier”, el anuncio de doce clubes europeos -seis de ellos ingleses, tres españoles y tres italianos- de lanzar una competición europea cerrada entre los equipos más ricos y poderosos del continente “no es una buena noticia para los aficionados y tampoco para el fútbol en este país”. “No me gusta el aspecto de esa propuesta”, reiteró Johnson, quien cree que los equipos son “algo más que marcas globales”.

El primer ministro cree que se deberían hacer los máximos esfuerzos para que los clubes “mantengan un vínculo con los aficionados” en los territorios donde se han originado históricamente. Las reacciones en el Reino Unido contra la iniciativa se multiplican en las últimas horas, procedentes desde la política, los medios de comunicación e incluso desde las hinchadas de los seis equipos ingleses implicados en el proyecto: Manchester United, Chelsea, Arsenal, Tottenham, Manchester City y Liverpool.

No ha sido el único mandatario europeo en pronunciarse en contra. El presidente francés, Emmanuel Macron, se mostró contrario a la propuesta. En un comunicado, la presidencia gala dijo que el Estado actuará para proteger la integridad de las competiciones federales, a nivel nacional y europeo. “El presidente de la República saluda la postura de los clubes franceses que han rechazado participar en un proyecto que amenaza el principio de solidaridad y méritos deportivos”, señala el Elíseo.

En la misma línea, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, se ha pronunciado al respecto. Según informan a LA RAZÓN desde la Embajada húngara en España, “al igual que sus homólogos de Reino Unido y Francia, se opone a la creación de una Superliga europea”.

Según Orban, “nuestro país está convencido de que la belleza del juego más popular del mundo consiste especialmente en que este deporte les pertenece a todos. Los más ricos no pueden expropiarse del fútbol”. Por tanto, Hungría apoya la posición de la UEFA y la FIFA a nivel europeo y global.

La Comisión Europea, también en contra

El vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, aseguro ayer que “Debemos defender un modelo europeo de deporte basado en valores, basado en la diversidad y en la inclusión. No hay margen para reservarlo para unos pocos clubes ricos y poderosos que quieren romper los lazos con todo lo que representan las asociaciones, las ligas nacionales, el ascenso y el descenso y el apoyo al fútbol base amateur. La universalidad, la inclusión y la diversidad son elementos clave del deporte europeo y de nuestro estilo de vida europeo”.