Tragedia
Al menos catorce muertos al caerse al vacío un teleférico en Italia
Entre los fallecidos hay un niño de nueve años y cinco turistas alemanes. El accidente se produjo tras la ruptura de un cable de sujeción de la cabina. Un menor de cinco años permanece en estado crítico
Al menos 14 personas fallecieron ayer en el accidente de un teleférico en el municipio de Mottarone, al norte de Italia. Entre ellos un niño de nueve años, mientras otro de cinco quedó herido de gravedad. Su estado, al cierre de esta edición, era crítico, aunque los médicos evitaron ofrecer más detalles. La cabina en la que viajaban cayó al vacío desde una altura de más de un kilómetro. El teleférico une el Lago Mayor, en la región de Piamonte, con una zona montañosa de los Alpes, a unos 1.500 metros de altitud. El accidente se produjo en una de las partes más altas, cuando faltaban unos 300 metros para el final del trayecto.
“Los testigos escucharon un fuerte silbido y luego vieron cómo la cabina retrocedía antes de precipitarse al chocar contra un pilar”, dijo a la televisión italiana Marcella Severino, alcaldesa del municipio cercano de Stresa. Según las primeras investigaciones, el accidente se produjo debido a la rotura del cable de sujeción del aparato. En la cabina, con capacidad para unas 40 personas, viajaban una quincena. Debido a la altura, todos los adultos fallecieron al chocar contra el suelo y sólo los niños pudieron salvar su vida en un primer momento. Los medios italianos informaron de que al menos cinco de los implicados eran turistas alemanes que visitaban la zona.
Los equipos de rescate tuvieron que llegar al lugar del accidente con helicópteros. La dificultad para acceder a la cabina, que quedó totalmente destruida en la ladera de la montaña, complicó enormemente las labores. Los dos niños en estado grave fueron trasladados a un hospital en Turín, a unos 150 kilómetros del punto en el que cayeron al vacío.
Revisado en 2014
El teleférico, que realizaba un trayecto de unos 20 minutos, fue cerrado en 2014 para realizar una revisión general. Los trabajos fueron largos y costosos, pues no volvió a abrir hasta pasados dos años, después de desembolsar más de cuatro millones de euros. Ayer, el ministro de Transportes, Enrico Giovannini, anunció que pondría en marcha una comisión para investigar lo sucedido. “Se trata de un evento dramático, que estamos siguiendo con la máxima atención. El Ministerio ha abierto ya todos los canales de información para verificar los controles que se hicieron en el pasado en la instalación”, afirmó a la televisión pública RAI.
La zona del accidente es una de las más ricas de Italia, a unos 120 kilómetros de Milán y colindante con Suiza. A menudo, en este tipo de accidentes en Italia se han comprobado deficiencias en el mantenimiento debido a desfalcos empresariales o incluso infiltraciones mafiosas. Sin embargo, no se recuerda un caso similar ni en la región ni en este tipo de infraestructuras en los últimos años. Los informes periciales deberán resolver los detalles. El día en Mottarone había amanecido lluvioso, aunque no había exce sivo viento.
Desde las instituciones, mostraron su conmoción por la tragedia. El presidente de la República, Sergio Matarella, afirmó en una nota que lo sucedido “suscita un profundo dolor por las víctimas y una grande aprensión por quienes están luchando en estas horas por salvar su vida”. “Expreso a las familias golpeadas y a toda la comunidad que está de luto la participación de toda Italia. A estos sentimientos se añade un llamamiento al riguroso respeto de todas las normas de seguridad que afectan a las condiciones de los transportes”, añadió. El primer ministro, Mario Draghi, fue más escueto. Ofreció las condolencias de parte del Gobierno y prometió esclarecer las causas en la mayor brevedad posible.
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