Evacuadas 400.000 personas en el Congo ante la amenaza de una segunda erupción del volcán Nyiragongo

Las autoridades de la República Democrática del Congo (RDC) han ordenado la evacuación de 400.000 personas en diez distritos de la ciudad de Goma, en el este del país, ante el riesgo de una nueva erupción del volcán Nyiragongo, informó hoy la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).

Según el Observatorio Vulcanológico de Goma, los fuertes temblores que continuaron durante el día de ayer, jueves, uno de ellos de 4,9 en la escala de Richter, podrían provocar que más lava se escape de las grietas de la montaña.

La primera erupción de lava, polvo y gas el pasado 22 de mayoprovocó la muerte de 30 personas, y destruyó casas, escuelas e instalaciones sanitarias, cortando carreteras y causando daños en los sistemas de suministro de agua y electricidad.

“Hasta ahora, la atención humanitaria se ha centrado en las personas directamente afectadas por la erupción volcánica y en los barrios de Goma sin acceso a agua, pero con el desplazamiento masivo de personas, el enfoque operativo se está ampliando”, afirmó el portavoz de OCHA, Jens Laerke, en una rueda de prensa en Ginebra.

Tras la orden de evacuación de las autoridades, miles de personas intentaron huir por las principales carreteras de Goma, la mayoría a pie pero también en coches y en barcos, lo que provocó atascos mientras continuaban los fuertes temblores.

“Desde ayer por la noche, 400 personas han llegado de la República Democrática del Congo a Ruanda debido a la actividad volcánica, pero esperamos que lleguen más”, añadió el portavoz de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Babar Baloch, quien agradeció que Ruanda mantenga sus fronteras abiertas en estas circunstancias.

Las necesidades en la provincia congolesa de Kivu del Norte, de la que es capital Goma, ya eran grandes dado que es una región que alberga al 44 % de los 5 millones de desplazados internos en el país y en la que el 33 % de las personas sufre inseguridad alimentaria severa.