¿Fin del EI?

La coalición contra el Estado Islámico pide reforzar la lucha contra el terrorismo en África

Los países miembro de la coalición internacional contra los yihadistas se reúnen hoy en Roma

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, el ministro de Exteriores italiano, Luigi Di Maio, y su homólogo estadounidense Antony Blinken, en Roma
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, el ministro de Exteriores italiano, Luigi Di Maio, y su homólogo estadounidense Antony Blinken, en RomaMASSIMO PERCOSSIEFE

Desde la llegada de Mario Draghi al Gobierno de Roma, las relaciones entre Estados Unidos e Italia viven su mejor momento de los últimos años. Draghi se ha empeñado en reforzar la posición atlantista de su país y sigue a pies juntillas la línea marcada por Joe Biden. El ministro de Exteriores italiano, Luigi Di Maio, fue el primer canciller extranjero en acudir a Washington bajo la nueva administración estadounidense. Y ayer, su colega Anthony Blinken le devolvió la visita. El secretario de Estado norteamericano se trajo consigo a una nutrida representación de los 83 países que forman la coalición anti-ISIS, auspiciada por Estados Unidos. El grupo compartió impresiones y reclamó una mayor atención al posible incremento del terrorismo en África. Entre los más de 40 ministros de Exteriores presentes en Roma, estaba la titular española, Arancha González Laya.

El ISIS ya palidecía, cuando en 2019 Estados Unidos informó de que había acabado con la vida del autoproclamado califa, Abu Bakr al-Baghdadi, en una operación en el noroeste de Siria. Los últimos focos en aquel país e en Irak, donde el Daesh controló el territorio durante años y llegó a instaurar una capital, se fueron apagando. Blinken resaltó ayer que ha habido “resultados significativos”, pero alertó de que todavía quedan unos 10.000 combatientes en Siria, lo que calificó como una “situación insostenible”. “Todavía hay mucho trabajo por hacer” en aquellos países, insistió, aunque Estados Unidos apoyó la iniciativa italiana para centrar ahora los esfuerzos en África.

Ese fue el principal anuncio por parte de los anfitriones de esta cumbre. La amenaza del ISIS “es particularmente grave en el continente africano, en concreto en la región del Sahel, pero también algunas áreas del África occidental, como el norte de Mozambique. Por este motivo, con el apoyo de Estados Unidos y muchos otros socios, hemos propuesto instituir un grupo de trabajo dedicado a África, que pueda identificar y frenar las amenazas terroristas ligadas al Daesh, aplicando diversas medidas que habrá que definir en coordinación con los aliados locales”, anunció el ministro Di Maio. La delegación española se mostró también muy entusiasta con esta iniciativa.

España e Italia están especialmente interesados en controlar todos estos movimientos en territorio africano, sobre todo teniendo en cuenta los flujos migratorios que llegan desde allí hacia Europa. Una mayor inversión en África y un aumento de la seguridad puede impedir que miles de personas se embarquen hacia sus respectivos países, piensan en Roma y en Madrid. En privado, Italia lleva años pidiendo a Estados Unidos más implicación en Libia. Entre esos socios locales, a los que se refería el ministro de Exteriores italiano, estaban Ghana, Mozambique y Burkina Faso, que fueron invitados a la cumbre.

El Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, destacó en sus redes sociales que “la UE sigue firmemente comprometida con la coalición contra el Estado Islámico, contribuyendo como socio no militar en sus esfuerzos en Irak y Siria”. Borrell también estuvo presente en Roma, aunque no participó en la rueda de prensa. La escena la protagonizaron únicamente Blinken y Di Maio. Ambos ofrecieron sus puntos de vista, pero tampoco hubo un comunicado oficial con conclusiones.

Blinken aprovechó, además, su visita a Roma para verse con el Papa Francisco. La audiencia privada con el Pontífice cobró especial relevancia tras el documento firmado por los obispos estadounidenses que podría negar la comunión a Biden por su apoyo del derecho al aborto. Sin embargo, como es habitual en estos encuentros, el Vaticano no ofreció apenas información sobre el contenido del encuentro. El secretario de Estado norteamericano fue recibido más tarde por Draghi en la sede de Gobierno y este martes participará en la reunión de ministros de Exteriores del G20 en la ciudad italiana de Matera, al sur del país.