Regalazo

Billetes de avión en primera clase y 10.000 dólares: el regalazo de la gerente de una marca de fajas a cada empleado

Sara Blakely, fundadora de Spanx, sorprendió a sus trabajadores para celebrar la venta de parte de su compañía por 1.200 millones de dólares

El regalo fue recibido con una enorme alegría por parte del personal de la marca de lencería Spanx
El regalo fue recibido con una enorme alegría por parte del personal de la marca de lencería SpanxDreamstimeLa Razón

La gerente de la firma de ropa interior femenina Spanx, Sara Blakely, celebró la venta de parte de la compañía por 1.200 millones de dólares con dos regalos inolvidables a sus empleados: billetes de avión en primera clase al destino de sus sueños y 10.000 dólares (unos 8.620 euros) a cada trabajador.

La semana pasada, Blakely publicó un vídeo en su cuenta de Instagram en el que dio las gracias a sus empleados después del nuevo acuerdo firmado por la conocida marca de fajas con el gigante de inversiones Blackstone, que adquirió una participación mayoritaria.

“Este es un momento muy importante para cada uno de ustedes”, dijo la fundadora de Spanx, “y quiero brindar por las mujeres que se han ido antes que yo y por todas las mujeres del mundo que no han tenido esta oportunidad”. Posteriormente, Blakely fue cuando anunció que le brindaría a cada uno de sus empleados dos billetes de avión en primera clase al lugar que eligieran junto con 10.000 dólares para gastar en el viaje.

“Para celebrar este momento, les he comprado a cada uno de ustedes dos boletos de primera clase a cualquier parte del mundo”, dijo la empresaria de 50 años. La noticia fue recibida con una enorme alegría por parte del personal de Spanx. “¡Realmente quiero que cada empleado celebre este momento a su manera y cree un recuerdo que les dure toda la vida!. Salud por 21 años de magia y muchos más por venir”, celebró la gerente.

Algunos de los empleados dijeron que viajarían a Sudáfrica y la Antártida. Otra persona aseguró que se escaparía con su novia a Suecia. Mientras que otra afirmó que se iba de luna de miel a Bora Bora. Blakely explicó que creó la empresa con el dinero que obtuvo de la venta de una máquina de fax y aseguró que siempre pensó que su firma de lencería algún día valdría 20 millones de dólares. “Todos se rieron de mí”, agregó.