La derrota de Boris Johnson en un feudo conservador, rural y pro Brexit desata las alarmas entre los tories

El Partido Conservador del primer ministro Boris Johnsonperdió el viernes el control de un escaño parlamentario que había estado en manos de los tories desde hace 200 años. Esta elección parcial se interpreta como una reacción de enfado de los votantes contra el mandatario británico, acosado por crisis y escándalos. La candidata centrista del partido Liberal Demócrata, Helen Morgan, ganó el escaño de North Shropshire por casi 6.000 votos, derrotando al candidato conservador, que en 2019 ganó con 23.000 votos.

“Esta noche, la gente de North Shropshire ha hablado en nombre del pueblo británico. Han dicho en voz alta y clara: ‘Boris Johnson, la fiesta se acabó’”, dijo Morgan en su discurso de victoria. “Nuestro país está pidiendo a gritos liderazgo. Señor Johnson, usted no es un líder”.

Los conservadores habían ganado todas las elecciones anteriores para una zona mayoritariamente rural del centro de Inglaterra desde que se creó el distrito electoral en su forma actual en 1983. El gran cambio se produce en un momento en que Johnson enfrenta críticas en varios frentes, incluidos los informes de que su personal celebró fiestas la Navidad pasada cuando el país estaba encerrado.

Las encuestas de opinión a nivel nacional muestran que los conservadores se están quedando atrás de sus principales rivales, el Partido Laborista. La votación para el área de North Shropshire, uno de los 650 escaños en el parlamento británico, fue convocada fuera del ciclo electoral regular porque el diputado conservador en ejercicio renunció después de que se descubriera que había violado las reglas al haber aceptado sobornos.

El gobierno intentó evitar esa dimisión cambiando las reglas diseñadas para detener la corrupción en el parlamento, pero se vio obligado a dar marcha atrás después de que la medida provocara una protesta sobre la integridad y la confianza bajo el liderazgo de Johnson.

La polémica estalló al revelarse que Paterson, que trabaja como asesor del laboratorio Randox, había cabildeado a ministerios en favor de esa empresa, en clara violación de las reglas parlamentarias por conflicto de intereses.

Los votantes suelen utilizar las llamadas elecciones parciales para castigar al partido gobernante, pero la escala de la victoria de los liberal-demócratas se tomará como prueba de una profunda insatisfacción del votante.

Johnson todavía mantiene una gran mayoría de los escaños en el parlamento después de una gran nvictoria electoral de 2019 basada en la promesa de ‘Get Brexit Done’ que unió a los votantes conservadores tradicionales de derecha.

North Shropshire es una zona partidaria del Brexit y decididamente conservadora. Los analistas dicen que la fuerte derrota del viernes puede socavar aún más la autoridad de Johnson sobre los diputados de su propio partido que ya cuestionan abiertamente a su líder por su gestión de la covid.

La derrota de los conservadores asesta otro revés al liderazgo de Johnson, que esta semana ya sufrió un golpe cuando casi 100 diputados “tories” desafiaron su autoridad al votar en contra de la introducción en Inglaterra de los certificados covid para entrar en grandes eventos y discotecas, como manera de contener la propagación de la variante ómicron de la covid-19-. A pesar de todo, la nueva directriz salió adelante con el apoyo de la oposición laborista.