Nuevo escándalo

«El vino de los viernes», más leña al «Partygate» de Johnson

La polémica tradición semanal en Downing Street, en el punto de mira de la Prensa británica

La portada de los diarios británicos con la exclusiva de "los vinos de los viernes" hoy
La portada de los diarios británicos con la exclusiva de "los vinos de los viernes" hoyAlberto PezzaliAgencia AP

Los trabajadores de Downing Street celebraban reuniones sociales en las que se consumía vino y cerveza todos los viernes durante la pandemia, pese a las diferentes restricciones vigentes en ese momento. La noticia revelada ayer por el Daily Mirror echa aún más leña al fuego al escándalo del Partygate.

El primer ministro Boris Johnson está contra las cuerdas y las revelaciones que, casi a diario, sacan ahora los medios sobre los eventos sociales que se celebraron en 2020 y 2021 en plenas restricciones sociales le ponen en una situación extremadamente delicada. El “premier” está desaparecido ahora en combate, justificando su ausencia con que uno de sus familiares ha dado positivo en covid-19, aun cuando en estos casos no es obligatorio el autoaislamiento.

Pero por mucho que Boris Johnson esconda ahora la cabeza cual avestruz, la tormenta no cesa. Todo lo contrario. Y son cada vez más voces, tanto fuera como dentro de sus propias filas las que piden su dimisión.

Los últimos eventos publicados hoy por el “Daily Mirror”, calificados en la prensa como “el vino de los viernes”, estaban programados de forma automática en las agendas de medio centenar de empleados de la oficina del primer ministro y en ocasiones las reuniones se llegaban a prolongar hasta la medianoche, pese a las restricciones sociales que existían en ese momento.

Como en anteriores ocasiones, Downing Street no desmintió la noticia y se limitó a pedir que se esperen a los resultados de la investigación interna que dirige la alta funcionaria Sue Gray sobre las supuestas fiestas ilegales en la sede del Ejecutivo. Las conclusiones podrían conocerse la próxima semana. Muchos diputados conservadores están a la espera de poder leerlas para decidir si se suman a las peticiones de moción de censura contra su líder.

“El vino de los viernes”, una larga tradición en la sede del primer ministro, contaba el propio Boris Johnson, quien en ocasiones se pasaba por el lugar de la reunión para departir con los empleados, según el periódico. Una fuente anónima señaló al medio que el jefe del Gobierno pasaba por los encuentros de camino a su apartamento oficial, ubicado en el mismo edificio, y a menudo animaba a su celebración.

El “Daily Mirror” publica la imagen de un frigorífico lleno de bebidas alcohólicas que entró en Downing Street a través de una puerta trasera el 11 de diciembre de 2020, cuando en Inglaterra estaba prohibido que personas no convivientes tuviesen contacto con fines sociales en interiores. En esas reuniones el personal se congregaba para jugar a juegos de mesa como el Pictionary mientras bebía vino y cerveza, según la misma fuente.

La nueva revelación se suma a un sinfín de informaciones difundidas en la prensa británica en las últimas semanas sobre presuntas violaciones a las restricciones sociales en el seno del Ejecutivo, en las que el propio Boris Johnson llegó a estar implicado de forma personal.

El pasado miércoles, el primer ministro pidió “disculpas” por haber participado en una fiesta en mayo de 2020 en los jardines de Downing Street, aunque argumentó que creía que se trataba de una reunión de trabajo y que apenas estuvo presente 25 minutos.

El Gobierno también ha presentado sus excusas a la mismísima Isabel II tras revelarse que el día antes del funeral del marido, el duque de Edimburgo, mientras ella aparecía sola en la Iglesia guardando la requerida distancia social, se celebraron dos festejos de despedida en las oficinas gubernamentales la noche anterior.