Invasión

Ucranianos de Izium provocan un envenenamiento masivo entre las tropas rusas

Pasteles y bebibas alcohólicas manipuladas han causado más de 500 bajas

Imagen de soldado ruso bebiendo un producto alcohólico, distribuida por el Servicio de Inteligencia ucraniano
Imagen de soldado ruso bebiendo un producto alcohólico, distribuida por el Servicio de Inteligencia ucranianojmzsa

Si algo no cunde en los conflictos es el buen ejemplo. A Putin y sus espías se les atribuye el envenenamiento de disidentes e incluso de los mediadores que buscan la paz. El dirigente ruso ha probado ahora su propia medicina.

Según informa el Servicio de Inteligencia ucraniano, los residentes del distrito de Izium “trataron” a los ocupantes con pasteles envenenados. Como resultado, dos de ellos murieron; y otros 28 terminaron en la unidad de cuidados intensivos. Asimismo, alrededor de 500 militares se encuentran hospitalizados debido a una intoxicación grave por alcohol “de origen desconocido”.

Desde el comienzo de la invasión, se tuvieron noticias de que los soldados rusos tenían que comer raciones caducadas, que pedían alimentos a la población y hasta tarjetas de teléfono para poder hablar con sus familiares. Algunos ucranianos habrían aprovechado esta circunstancia para envenenar a sus enemigos.

La ciudad de Izium, en la región de Jarkov, retomada por los rusos, ha sido objeto de ataques contra la población, según Amnistía Internacional. La población ha estado sometida al suministro decreciente de alimentos y agua y está al límite, mientras los civiles se ocultaban en sus sótanos.

Entre el 9 y el 12 de marzo, Amnistía Internacional entrevistó a 26 residentes de la ciudad inmediatamente después de su evacuación a Sviatohirsk, ciudad de la región de Donetsk que sigue en su mayor parte bajo control ucraniano y que está bajo fuego ruso ininterrumpido. “Decenas de pequeñas localidades y pueblos de Ucrania están bajo ataque incesante y sus desesperados residentes se encuentran entre dos fuegos o bajo asedio de las fuerzas atacantes rusas”, declaró Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central. “Los testimonios que hemos recabado sobre Izium revelan el terror que experimenta la población civil de la ciudad, atrapada

Dentro del capítulo de “horrores de la guerra”, aparte del descubrimiento de cadáveres de civiles asesinados a sangre fría por los rusos, el citado Servicio de Inteligencia asegura que “en la ciudad de Narovlya (Bielorrusia), los soldados rusos montaron un bazar especializado en la venta de bienes saqueados en Ucrania”.

En 1945, durante los juicios de Nuremberg contra los nazis, se añadió un artículo a la carta de Londres sobre crímenes de guerra: “asesinato, malos tratos o deportación con fines de trabajo forzoso o con cualquier otro fin de poblaciones civiles en los territorios ocupados, asesinato o maltrato de prisioneros de guerra o personas en el mar, ejecución de rehenes, saqueo de bienes públicos o privados , destrucción desenfrenada de ciudades y pueblos, o devastación no justificada por demandas militares”.