Parte de guerra

Zelenski advierte de que Bucha aleja las conversaciones de paz

Rusia intensifica el bombardeo de las ciudades en el sur y el este de Ucrania y moviliza a 60.000 reservistas

A medida que se acumulan pruebas de los crímenes cometidos en Bucha y otras áreas liberadas, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, manifestó ayer que todos los crímenes serán investigados mientras culpa a las tropas rusas y a quienes dan órdenes por los asesinatos. El líder ucraniano indicó que Occidente tuvo la oportunidad de evitar el desastre, pero no quiso «sacar a Ucrania de la zona gris» hace14 años cuando la OTAN rechazó su entrada en la cumbre en Bucarest. «Invito a Merkel y a Sarkozy a visitar Bucha y ver a lo que llevó la política de concesiones respecto a Rusia. Ver con sus propios ojos a las ucranianas y a los ucranianos torturados hasta muerte», manifestó Zelenski en su discurso más duro hasta la fecha. «Nuestra tierra fue pisada por la maldad concentrada. Asesinos. Torturadores. Violadores. Saqueadores. Aquellos que se llaman a ellos mismos el Ejército y que solo merecen la muerte después de lo que cometieron», añadió el mandatario sobre las atrocidades de los soldados rusos. Para Zelenski, que visitó ayer el infierno de Bucha, Rusia ha cometido crímenes de guerra y «genocidio». Lamentó que la barbarie rusa aleja las conversaciones de paz.

Solo en Bucha se han encontrado 340 cuerpos hasta el momento, sin embargo los cadáveres de numerosas tumbas improvisadas en toda la ciudad aún deben ser exhumados. La fiscal general de Ucrania, Iryna Venediktova, advirtió que el balance de víctimas podría ser aún mayor en Borodyanka. Varios funcionarios rusos, incluidos Sergei Lavrov y Dmitri Peskov, y periodistas pro-Kremlin aseguraron que las imágenes de las víctimas son falsas o parte de la provocación por parte de Reino Unido o de EE UU. Moscú ha negado que haya matado a civiles en Ucrania, lo que se ha demostrado falso dada la cantidad de imágenes y vídeos verificados, así como de miles de testigos de primera mano. La última cifra de la ONU, publicada el domingo, es de 1.417 muertes desde el comienzo de la invasión, aunque los propios funcionarios han reconocido que la cifra real es mucho mayor. La matanza de civiles de Bucha elevó ayer el nivel de indignación en los gobiernos de países de todo el mundo. Mientras tanto, la secretaria de Exteriores de Reino Unido, Liz Truss, y la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas han pedido que Rusia sea expulsada del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Se necesitarían dos tercios de los votos para ser aprobada la expulsión.

Ayer también, al menos siete personas murieron y 34 resultaron heridas tras ser alcanzados con una bomba en un parque en Jarkiv por la noche. La segunda ciudad más grande de Ucrania ha estado sometida a incesantes ataques de artillería y misiles durante semanas dejando al menos el 15% de los edificios gravemente dañados. La urbe está bloqueada, mientras que los mayores combates se producen más al sur, cerca de Izium, tomada por las tropas rusas este sábado. El Ejército ucraniano afirmó que Jarkiv y las tropas ucranianas en las regiones de Donetsk y Lugansk son el objetivo probable de un asalto inminente de las tropas rusas. Fuertes combates continuaron en Donbás, donde un gran ataque ha sido repelido en Mariinka. Los intentos de evacuar a la población de Mariupol fracasaron una vez más ayer, a pesar de todos los intentos previos de los mediadores turcos, griegos y franceses para garantizar el paso seguro a algunos de los 130.000 residentes que siguen atrapados. En Lugansk se produjeron incesantes bombardeos por parte de las fuerzas rusas. Ayer hubo informes sobre el desbloqueo parcial del asedio de Chernigiv a medida que las tropas rusas se retiran gradualmente hacia el norte. Algunos residentes de la ciudad, donde el 70% de los edificios han sido dañados por la artillería rusa, tienen electricidad y agua por primera vez en semanas. Las autoridades locales de Sumy y Zhitomir confirmaron una retirada completa de las tropas rusas mientras los servicios militares y de emergencia ucranianos están trabajando en el desminado de las áreas liberadas.En el sur, se escucharon numerosas explosiones en Jerson, donde varias aldeas permanecen sin electricidad y no hay acceso a alimentos ni medicamentos. Además, Mykolaiv y la vecina Ochakiv volvieron a sufrir ataques con misiles por la noche. Varias personas murieron después de que una bomba de racimo explotara cerca de una parada de transporte en Mykolaiv, según el alcalde. La importante ciudad portuaria de Odesa fue atacada con misiles por segunda noche consecutiva. Un análisis previo reveló que el Ejército ruso está utilizando fuentes abiertas, como vídeos e imágenes de usuarios de redes sociales, para elegir sus próximos objetivos. Una base petrolera en Ternopil también fue atacada durante la noche y no se han reportado víctimas. El Ejército ucraniano afirmó que Rusia ha iniciado una movilización secreta de sus reservistas en varias regiones, con el objetivo de reclutar 60.000 soldados con experiencia. Se les proporcionará equipo militar antiguo, la mayor parte del cual ha estado almacenado durante más de 30 años.