Rusia bombardea Kiev durante la visita del jefe de la ONU

Las tropas ucranianas en Mariupol se niegan a rendirse mientras Rusia continúa golpeando la acería Azovstal con aviación y artillería, desde barcos y con bombas de fósforo. Los defensores ucranianos informan que su hospital militar fue alcanzado por una bomba en violación de la Convención de Ginebra. Los ucranianos no confían en las promesas de que Rusia tratará a quienes se rindan de acuerdo con el derecho internacional.

Ayer también surgieron nuevas evidencias de que Rusia disparó a los soldados ucranianos que intentaban rendirse cerca de Donetsk. La embajadora de EE UU para la Justicia Penal Global, Beth Van Schaack, aseguró ante el Consejo de Seguridad de la ONU que «tenemos información creíble de que una unidad militar rusa que operaba en las cercanías de Donetsk ejecutó a ucranianos que intentaban rendirse, en lugar de detenerlos».

Las ejecuciones son parte de una lista cada vez mayor de crímenes de guerra de los que Moscú ha sido acusada, la cual incluye los ataques a civiles, el secuestro de niños, las torturas y las violaciones. Un nuevo vídeo, publicado por CNN, mostró que los cadáveres de civiles en Bucha permanecieron en las calles durante días mientras pasaban los vehículos y soldados rusos. Desacredita la afirmación rusa de que las pruebas fotográficas son fabricadas por Ucrania o Reino Unido con el uso de actores.

Tras visitar Moscú el martes, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, describió ayer la guerra como «un absurdo» antes de su encuentro con Volodimir Zelenski. Guterres recorrió Borodianka, donde decenas de civiles fueron asesinados por el Ejército ruso. «Insto a la Federación de Rusia a aceptar y colaborar con la Corte Penal Internacional», indicó Guterres tras su visita a la fosa común de Bucha, donde expresó su «total apoyo» a la investigación de la CPI.

Durante la reunión entre Guterres y Zelenski en la capital, el Ejército ruso no dudó en orquestar un ataque con misiles. Las detonaciones causaron importantes columnas de humo negro en el cielo e incendios en al menos dos edificios de gran altura. Las autoridades confirmaron que Guterres y su equipo estaban a salvo.

La tensión aumenta en la región ocupada de Jersón. Se escucharon varias explosiones durante la noche cerca de la torre de televisión. Llegaron un día después de que la protesta pacífica fuera dispersada violentamente por las tropas rusas y dos días después de que los rusos nombraran ilegalmente a nuevos jefes de la administración de la ciudad y la administración regional, sin haber logrado convencer al alcalde ucraniano, elegido democráticamente, y otras autoridades para que cooperaran con ellos. Los funcionarios rusos anunciaron que el rublo ruso comenzará a introducirse en la región el 1 de mayo con la moneda ucraniana, la grivna, gradualmente saliendo de circulación.

Asimismo, el consejo local de Krasnoiarsk en Rusia informó sobre planes de «expropiar los excedentes» de los productos agrícolas de la región y transportarlos a Krasnoiarsk. La región de Jersón, como gran parte del resto de Ucrania, se vio especialmente afectada por la hambruna, Holodomor, creada por el régimen soviético en 1933, en la que murieron entre 3 y 7 millones de ucranianos.

En cuanto a las explosiones en la ciudad rusa de Belgorod, las autoridades locales afirmaron que los sistemas de defensa aérea se activaron durante la noche. El ministro de Defensa británico, Ben Wallace, aseguró que los ataques de Ucrania a objetivos logísticos en Rusia serían totalmente legítimos.