América Latina
El vínculo de Gustavo Petro y el M-19
El presidente electo de Colombia marca un hito en la historía del país, no solo por ser su primer gobernador de izquierda, sino también por ser un exguerrillero
Gustavo Petro ha marcado un hito en la historia de Colombia. Con su triunfo será el primer presidente de izquierda en el país, pero no cualquiera, sino un exguerrillero, que perteneció a la organización revolucionaria “Movimiento 19 de Abril” o “M-19″ como se le conoce popularmente.
Durante su postulación, este ha sido uno de los eslabones más difíciles que el candidato ha arrastrado, a continuación veremos que fue el M-19 y cuál fue la participación del hoy presidente electo de Colombia.
¿Qué fue el movimiento M-19?
El Movimiento 19 de Abril o M-19 como se le conoce popularmente, fue una organización revolucionaria y guerrillera de carácter urbano en Colombia. Nació el 19 de abril de 1970 después de que el candidato presidencial Misael Pastrana Borrero le ganara las elecciones de manera irregular a Gustavo Rojas Pinilla.
Si bien lleva la fecha 19 de nombre por el día de las elecciones, el movimiento empezó a actuar desde el 17 de enero de 1974, que estuvo ágil hasta el 8 de marzo de 1990 que ocurrió su desmovilización.
Pese a que muchos lo consideraron como un movimiento revolucionario y opositor, este movimiento participó en el conflicto armado de Colombia, teniendo como aliados a grupos guerrilleros como las FARC, ELN, MAQL que fue un grupo guerrillero indígena, al EPL, entre otros.
Su ideología, se remonta “al robo de la espada de Bolívar”, se caracterizaron por ser bolivarianos, nacionalistas, antiimperialistas y anti oligárquica. La idea por la que pelearon tener en el país una democracia verdadera y participativa: Ellos abogaban por unas elecciones limpias y transparentes; luego del supuesto fraude en las elecciones de 1970.
Los comandantes en jefe eran Carlos Pizarro Leongómez, Álvaro Fayad, Iván Marino Ospina y Jaime Bateman Cayón. El M-19 tuvo presencia con frentes en Bogotá, Tolima, Huila, Caquetá, Valle del Cauca, Cauca, Santander, César y Quindío.
Petro y el M-19
La militancia en esta guerrilla durante su juventud es una de las cosas que más criticaron sus opositores, aunque el carácter del M-19 fue diferente al de otros grupos armados como las FARC. El M-19 tuvo un desarrollo fundamentalmente urbano y estudiantil más que militar, y en él, Gustavo Petro nunca fue parte de acciones armadas.
Su punto fuerte siempre fue la oratoria y los discursos políticos. Algo que comenzaría a explotar con la desmovilización de la guerrilla.
Y es que cuando Gustavo Petro se vinculó al M-19 en 1978, en Latinoamérica, se vivía un escenario político de cambios. En Chile, por ejemplo, el año del nacimiento del grupo colombiano (1970), se proclamaba la victoria de Salvador Allende.
Petro ingresó al Movimiento 19 de abril con 18 años, cuando el grupo ya era parte de la llamada segunda ola de movimientos guerrilleros en el país que creció en toda la región en la década de 1970, influenciados también por la Revolución cubana.
Según recopilan los informes, el M-19, a través de su agencia de comunicación ‘Oiga Hermano’, difundían sus boletines y comunicados, a la vez que tenían cercanía con la revista Alternativa, una publicación de periodismo de investigación. Así se dieron las primeras apariciones de Gustavo Petro con el movimiento guerrillero.
No obstante, el ingreso oficial de Petro se dio cuando Pío Quinto Jaimes, militante del M-19, le entregó los documentos que resumían la Quinta Conferencia. En esta deliberación estaban plasmadas las conductas políticas, y las líneas teóricas y de acción del movimiento.
“La idea de unirme al M-19 me daba susto. No era un asunto cualquiera. Era entrar a una cuestión armada”, afirma en su autobiografía “Una vida, muchas vidas”.
Las huellas del M-19
El M-19 tiene a cuestas una de las tragedias más dolorosas de la historia reciente de Colombia. Esta guerrilla tomó el Palacio de Justicia el 6 de noviembre de 1985, en el centro de Bogotá. Durante dos días, los insurgentes retuvieron a 350 rehenes, entre magistrados, empleados judiciales y visitantes, mientras el edificio ardía en llamas, detalla CNN en español.
Tras el operativo militar para retomar el control del edificio murieron 98 personas y 11 más fueron declaradas como desaparecidas.
Los adversarios políticos de Petro le achacan haber sido parte de lo que ahí ocurrió, considerado como uno de los episodios violentos más trágicos en la historia de Colombia. No obstante, ha sostenido en reiteradas ocasiones que él no participó en esta toma.
“Cuando sucedieron los hechos de la toma violenta al Palacio de Justicia y la retoma aún mayor, mucho más violenta del Estado del Palacio de Justicia, yo estaba siendo torturado en una caballería del Ejército en la ciudad de Bogotá. Era un muchacho en aquel entonces y fui a parar a la cárcel después de la tortura”, dijo Petro a CNN en 2013.
Aliado de la Paz
Petro se adhirió a los acuerdos de paz entre el M-19 y el Gobierno en 1990. Esta firma supondría el inicio de su dilatada carrera política a nivel nacional. En 1991, fue elegido representante de la Cámara por Alianza M-19, un movimiento formado por exmiembros de la extinta guerrilla y militantes de partidos de izquierda.
Su etapa política lo alejó de la clandestinidad, pero nunca del miedo a ser asesinado por su ideología. La izquierda en Colombia fue perseguida durante años por parte de grupos paramilitares y fuerzas estatales. Petro vio peligrar su vida en numerosas ocasiones y asistió al asesinato de varias personas de su entorno más cercano.
Después de su primera toma de contacto con la política nacional, no fue reelegido en 1994, aunque si pudo volver como Representante de la Cámara en 1998 a través del Movimiento Vía Alterna.
Esta nueva etapa fue la que empezó a hacer resonar el nombre de Gustavo Petro en los pasillos del Congreso colombiano.
Su facilidad para la oratoria en medios de comunicación, unida a las acusaciones contra diferentes corruptelas, hicieron que las personas comenzaran a reconocer al joven político. Entre los primeros casos que pudo investigar está el uso indebido del Presupuesto de Desarrollo Rural, aunque lo que le llevó a la fama fueron sus denuncias contra los nexos que tenía la política colombiana con el paramilitarismo.
El final de la década de 1990 y comienzo de la del 2000 vio como estos grupos armados experimentaron su mayor auge, en algunos casos con el beneplácito del poder estatal.
Gustavo Petro fue capaz de demostrar como representante y después como senador las relaciones que tenían numerosos políticos regionales y nacionales con el paramilitarismo, especialmente durante el Gobierno de Álvaro Uribe Vélez. De hecho, llegó a defender que el expresidente apoyó a estos grupos armados y que había permitido asesinatos incluso en terrenos de su propiedad.
Sus investigaciones contra políticos de la costa Atlántica llevaron a algunos de ellos a la cárcel y su confrontación directa con el expresidente Uribe elevó su popularidad hasta el punto de ser el tercer senador elegido con mayor número de votos en todo el país en 2006, durante su militancia en el partido Polo Democrático.
La vida republicana de Colombia
Colombia inició su vida republicana el 21 de septiembre de 1819 con la Presidencia de Simón Bolívar y 203 años después, luego de varios intentos fallidos y asesinatos, la izquierda llega al poder con Gustavo Petro, el presidente electo que pudo alcanzar lo que no consiguieron otros líderes progresistas.
Petro, que ganó el balotaje con casi 11,3 millones de votos (el 50,44 %) frente a los casi 10,6 millones (47,31 %) de su rival, el populista Rodolfo Hernández, fue elegido este domingo presidente de Colombia para el periodo 2022-2026 y representa un giro antes impensable en el país andino.
✕
Accede a tu cuenta para comentar