La última misión del Mirage 2000C, el icónico avión de combate que Francia acaba de jubilar

Con 235.000 horas de vuelo y 40 años en su hoja de servicio, las Fuerzas Aéreas de Francia han retirado para siempre al icónico avión de combate Mirage 2000C,una variante del Mirage 2000 que durante años ha desarrollado importantes funciones de defensa de la mano del primer escuadrón de cazas Ile de France, creado por el general deCharles De Gaulle en 1940. De esta manera, Francia sigue apostando por reforzar su flota de cazas dominada por el más avanzado y versátil Rafale.

Los primeros Mirage 2000C se fabricaron en serie en 1983 y entraron en servicio un año después. En sus mejores momentos, hasta nueve escuadrones diferentes operaron esta aeronave en tres bases militares francesas. Pero el desarrollo tecnológico y las escasas posibilidades de actualización del aparato han hecho que el avión se considerara anticuado mucho. Para algunos, hoy día es casi reliquia que, pese a todo, seguirá siendo usado como nave de entrenamiento ya fuera de servicio.

El pasado día 23 de junio tuvo lugar la despedida del Dassault Mirage 2000C después de que éste haya llegado al final de su vida útil, si bien la última misión fue el 9 de junio en una operación para defender el espacio aéreo en el sureste de Francia. En su última salida, el avión estuvo equipado con dos misiles aire-aire de corto alcance Magic II de la década de 1980 y dos cañones internos de 30 mm del caza. La ceremonia en la que se retiró el avión se celebró en la Base Aérea 115 en Orange, donde participó la Fuerza Aérea y Espacial francesa con uno de los Mirage-2000C pintado de negro y plata para la ocasión, con la etiqueta de “Misión cumplida” en los bordes posteriores del ala delta tradicional.

Cuando entró en servicio en la década de los ochenta, el Mirage era una poderosa y avanzada aeronave y en seguida se posicionó como uno de los aviones más capaces de Europa con un entonces vanguardista sistema de control fly-by-wire y una configuración aerodinámica que aportaba un alto nivel de agilidad y un manejo excepcional. Además, llevaba un misil guiado por radar que era raro en aquella época. Ni tan siquiera los F-16 europeos iban armados con algo así en ese momento, ya que no fue hasta más tarde cuando recibieron los misiles aire-aire AMRAAM.

En su hoja de servicios y en sus prestaciones, el Mirage 2000C deja un reguero tanto de seguidores como de críticos. El teniente coronel Adrien Gorremans, comandante del escuadrón “Ile de France”, es, obviamente, uno de sus mayores admiradores cuando dice que el Mirage 2000C “era muy superior al F-16A antes de la modernización de la MLU. Su radar RDI era superior al APG-66 del F-16A. Con el Super 530D, disponía de un buen misil guiado por radar, mientras que el F-16A europeo tenía que conformarse con el AIM-9L Sidewinder”. El misil Super 530D guiado por radar fue retirado en 2012, dejando al Mirage 2000C en clara desventaja frente a la mayoría de los cazas modernos. “En resumen -añadió Gorremans-, el Mirage 2000C era muy consistente, con un rendimiento de vanguardia y unas cualidades de vuelo excepcionales”.

El Mirage 2000C también podía volar en misiones de ataque a tierra con bombas no guiadas de 500 libras. Desde que el Super 530D se retiró tras agotar su vida útil, el avión fue reconvertido al Mirage 2000-5F, que pasó a liderar la defensa aérea equipado con el misil aire-aire MICA en versiones de radar activo e infrarrojo.

A lo largo de estos cuarenta años, el Mirage 2000C realizó misiones de escolta y reconocimiento en Kuwait y el sur de Irak durante la primera guerra del Golfo en 1990-1991 antes de hacer su debut en combate durante las patrullas aéreas sobre Arabia Saudí. En la guerra de los Balcanes, participó en las operaciones de vigilancia aérea sobre Bosnia y Herzegovina y también realizó patrullas aéreas de combate, lanzando bombas no guiadas por primera vez en un entorno hostil.

Se puede decir que el caza francés ha estado presente en muchos de los puntos calientes de las últimas décadas. Los Mirage 2000C se desplegaron en Lituania en varias ocasiones para participar en las misiones de la policía aérea del Báltico de la OTAN como medida de disuasión a Rusia. Pero también apoyó operaciones militares francesas en la región africana del Sahel, donde lanzaron ataques con bombas GBU-12 contra organizaciones terroristas islamistas cercanas mientras atacaban desde Níger. Y en la Guayana Francesa ayudó a crear una zona de exclusión aérea sobre el centro espacial durante los lanzamientos.