Defensa

¿Están preparados los F-22 Raptors de Estados Unidos para una guerra a gran escala?

El incremento de la tensión con China o Rusia tras la invasión a Ucrania alerta a las fuentes de inteligencia de Washington, que analizan su armamento de Defensa

F-22 Raptors
F-22 RaptorsAir Force EE UU

Sigilo, velocidad, agilidad o conocimiento son algunas de las características que mejor define a los F-22 Raptor de Estados Unidos, que llegaron de la mano de Lockheed Martin para proporcionar un dominio aéreo sin precedentes a las Fuerzas Aéreas estadounidenses. De quinta generación, su armamento o arquitectura lo convierten en uno de los mejores cazas de dominio aéreo del mundo.

No obstante, Washington anunció hace unas semanas que, dentro de un amplio paquete de transformación con cambios que se aplicarán dentro del Presupuesto en Defensa de 2023, las fuerzas estadounidenses decidieron dar parte de baja de su flota de estos avanzados reactores furtivos. Una decisión que sorprende por el carácter y el tipo de aparato que se comienza a retirar.

De los 186 F-22 Raptor, EE UU dejará en tierra a 33. La transformación y baja del material en uso estaría enmarcada dentro de la voluntad de contrarrestar la evolución de los diseños de aviones de combate que está materializando China, y el proceso trata de llevar a cabo una retirada total de este modelo en cuestión de unos diez años, aplicando el dinero que no se gasten en su sostenimiento al futuro NGAD (Next Generation Air Dominance), que contempla una familia de sistemas para seguir manteniendo el dominio del cielo.

Hasta esa fecha, EE UU tendrá en su equipo a estos aviones, que utilizaría en caso de una guerra a gran escala. El incremento de la tensión con Rusia, tras la invasión a Ucrania, y con el gigante asiático ha alertado a las fuentes de inteligencia por una posible contienda entre los países, así como el envío de armas a Kyiv.

Pero un estudio presentado por la Oficina General de Rendición de Cuentas (GAO) de Estados Unidos ha presentado una serie de conclusiones en las que relata que de todos los F-22 Raptor disponibles (186, incluyendo los que se quedarían en tierra), solo 93 son actualmente efectivos en combate, es decir, la mitad.

El KC-135, el único fiable de la Fuerza Aérea de EE UU

El informe, nombrado como “Actions Needed to Address Persistent Sustainment Risks”, analiza ocho aviones de la Fuerza Aérea y Armada, entre ellos bombarderos, cazas, aviones cisterna y de reconocimiento. Con una métrica, denominada “Tasas de capacidad de la misión”, se explicaba la salud del mantenimiento y las tasas de preparación de los aviones. Asimismo, se comparó los años 2015 a 2021 y se estableció un objetivo de preparación en términos porcentuales para su avión.

Los aviones analizados recibieron notas menos que estelares. Solo el KC-135 de la Fuerza Aérea tuvo un objetivo del 100% para todos los aviones cisterna. Además, fue el avión con mayor capacidad operativa del estudio.

Así pues, dos cazas importantes, el F-22 Raptor y el Super Hornet, tienen una puntuación de preparación inferior. Por ejemplo, en el caso de este último, solo unos 267 de los 530 cazas disponibles están listos para volar en condiciones de misión.

“Ni la Fuerza Aérea ni la Armada han completado planes de mitigación para remediar los desafíos de mantenimiento, los riesgos o los impactos relacionados identificados en cualquier revisión de mantenimiento”, advierte el informe, lo que ha alertado al Pentágono. Así, los resultados explican que la Fuerza Aérea y la Armada “no pueden abordar plenamente los retos de mantenimiento de la aviación a nivel de unidad que afectan a la disponibilidad de las aeronaves necesarias para el entrenamiento y las operaciones”.