Nueva fuga, y van cuatro, de terroristas del Estado Islamico encerrados en una cárcel

Ya van cuatro. Una en Afganistán, otra en Siria y dos en el Congo, la última esta misma semana. la culpa será de los que asalatan las cárceles, pero alguna responsabilidad tendrán los encargados de custodiarlas. A esto hay que unir, que cuando los talibanes tomaron el poder, el año pasado, abrieron las puertas de todas las prisiones en las que había terroristas, tanto de Al Qaeda como del Estado Islámico, un error en este caso, como se habrán comprobado por los continuos ataques que sufren a cargo de Daesh, incluso contra miembros de la poderosa red Haqqani.

Según informan los propios terroristas en sus redes sociales, “los combatientes del Estado Islámico asaltaron la prisión central de Kakwangora, en Butembo, este del Congo, y liberaron a decenas de prisioneros musulmanes. Los combatientes del Estado Islámico lanzaron un ataque coordinado en la madrugada del miércoles (10 de agosto) contra la prisión utilizando ametralladoras pesadas”.

Agrega que “los combatientes se dividieron en tres grupos: el primero atacó el cuartel de la guardia y mató al menos a dos miembros y el resto de los guardias huyó; yel segundo grupo irrumpió en la prisión después de romper sus puertas y quemar partes de ella; mientras, un tercer grupo se desplegó en la carretera que conduce a la ciudad de Butembo”.

“Los combatientes lograron liberar a decenas de prisioneros musulmanes, para comenzar la tarea de evacuación y retirada distribuyendo a los prisioneros liberados en grupos separados. Esta es la segunda vez que los combatientes del Estado Islámico en el Congo asaltan una prisión central, después de que previamente habían asaltado la prisión central de Kangbai en Beni”, concluyen.

Esta estrategia crimial forma parte de la campaña de Daesh de “derribar los muros” , puesta en práctica para dar moral tanto a los presos como a sus familias; e insuflar una moral de victoria a los yihadistas.