Reino Unido

El último enfado de Carlos III: “¡No tolero esa maldita cosa! Siempre pasa lo mismo”

El monarca pierde la paciencia al mancharse con una pluma mientras firmaba en el libro de visitantes del castillo de Hillsborough

La vicepresidenta del Sinn Fein, Michelle O'Neill, estrecha la mano a Carlos III en Belfast
La vicepresidenta del Sinn Fein, Michelle O'Neill, estrecha la mano a Carlos III en BelfastNiall CarsonAgencia AP

El rey Carlos III visitó este martes Irlanda del Norte como parte de su gira por Reino Unido para liderar el duelo nacional tras la muerte de su madre, la Reina Isabel II.

El encuentro con los principales partidos políticos en el castillo de Hillsborough estuvo marcada por el más estricto protocolo, pero el vídeo de un insólito incidente del rey con una pluma que se viralizó tras la reunión demostró que a veces las sorpresas ocurren.

Tras su encuentro en las afueras de Belfast con los principales representantes políticos norirlandeses, el Carlos III se predisponía a firmar un libro de visitantes del castillo de Hillsborough. El primer momento de sorpresa llega al principio de la filmación, cuando el monarca anota la fecha equivocada para su firma.

“¿Hoy es el 12 de septiembre”, pregunta el rey a la reina consorte Camila y a un grupo de ayudantes, uno de los cuales le responde que en realidad es el día 13. La frustración del rey se hace palpable en cuanto reconoce que ha puesto mal la fecha, a lo cual se le suma la aclaración de Camila de que ya había “12 de septiembre” en otro lugar.

“Oh, Dios, cómo odio esto”, se escucha a Carlos III decirle a Camila mientras le entrega la pluma. Es en ese momento que la reina consorte parece notar que la tinta se ha rebalsado y le ha manchado los dedos al monarca.

“¡No tolero esa maldita cosa! Siempre pasa lo mismo, en cada bendita ocasión”, se queja airadamente Carlos III mientras empieza a limpiarse los dedos y un asistente reemplaza la pluma.

Frustrado, el rey decide abruptamente irse de la habitación secundado por sus asistentes mientras Camila se sienta y completa la tarea de firmar el paso de la pareja por el castillo.

Las relaciones entre la República de Irlanda y el Reino Unido no atraviesan por su mejor momento y, en Belfast, los partidos norirlandeses no se ponen de acuerdo para formar un Gobierno de poder compartido entre unionistas y nacionalistas por los problemas que están causando el protocolo del Brexit para la región.

En este contexto, el rey, acompañado por su esposa Camila, reina consorte, se comprometió este martes a seguir el “excelente ejemplo” de Isabel II y aseguró que trabajará para garantizar el “bienestar” de “todos los habitantes” de Irlanda del Norte.

Fueron sus primeras palabras públicas en la región como monarca, al comienzo de un nuevo reinado que será continuista respecto a la línea de reconciliación marcada por su madre en los últimos años, gran impulsora también de la normalización de las relaciones entre Dublín y Londres, ahora empañadas por su divorcio con Bruselas.

Se espera, por ello, que el jefe del Estado británico sabrá adaptarse a la situación actual y facilite un nuevo clima de entendimiento.