Ucrania denuncia nuevos ataques rusos contra objetivos civiles en Jersón

Moscú ha rechazado el plan de paz de diez puntos de Kyiv subrayando que cualquier acuerdo debe tener en cuenta “las realidades actuales con respecto al territorio ruso”. Con esta declaración, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, se refirió a la anexión ilegal de cuatro regiones de Ucrania, parcialmente ocupadas por Rusia. “Los planes que no tienen en cuenta estas realidades no pueden ser realmente pacíficos”, insistió este miércoles.

Ucrania ha subrayado abiertamente que la paz solo es posible si las tropas rusas abandonan el territorio de Ucrania que han ocupado, incluidas estas regiones y Crimea, que se incorporó por la fuerza a Rusia en 2014. El secretario de su Consejo de Seguridad y Defensa Nacional, Olexiy Danilov, ha respondido a las declaraciones de Peskov asegurando que todo lo que le espera a Rusia es “la vergüenza, la derrota y su derrumbe”.

Vale la pena recordar que después de su rápido avance a principios de la invasión, el Ejército ruso se ha estado retirando a lo largo de la línea del frente con la excepción de partes de Donetsk.

Ucrania logró liberar gran parte del norte en abril ,ya que Rusia reconoció que no podía capturar Kyiv y otras grandes ciudades de la zona. Posteriormente, Ucrania infligió dolorosas derrotas a Rusia en Járkiv, Lyman y Jersón. A pesar de no recibir tanques modernos o aviones de combate de sus socios extranjeros, continúa presionando en Lugansk mientras ataca la logística rusa en la parte ocupada de Zaporiyia.

Las autoridades ucranianas y fuentes sobre el terreno denuncian casos de tortura, saqueo y deportación forzosa de lugareños en los territorios ocupados por parte de las fuerzas rusas.

Mientras tanto, Rusia ha intensificado el bombardeo de la ciudad de Jersón, que considera parte de su territorio, lo que ha obligado a huir a cientos de vecinos. Se lanzaron 33 cohetes contra él en las últimas 24 horas, informaron el miércoles las fuerzas armadas de Ucrania. Un ala de maternidad de un hospital local resultó dañada. Nadie salió herido.

Gran parte de la población de la ciudad se había ido ya durante su ocupación por parte de Rusia. Sus residentes, dispersos por Ucrania y otros países, no han podido regresar a sus hogares debido a los bombardeos rusos. Muchos de los que se han quedado en la ciudad hasta ahora, encuentran aterradora la perspectiva de tener que abandonar sus hogares. Habiendo sobrevivido a la ocupación rusa, algunos insisten en permanecer en sus hogares liberados, con la esperanza de que el ejército de Ucrania eventualmente pueda empujar a las tropas rusas desde la orilla opuesta delrío Dniéper para detener el bombardeo.

La situación es también difícil en las ciudades de Donbas. Volodimir Zelenski ha informado que “no queda ningún lugar en Bajmut que no esté cubierto de sangre”. Dijo que 70.000 personas vivían en esta ciudad en la región oriental de Donetsk antes de la invasión. “Solo unos pocos” se han quedado.

Si bien Rusia ha confiado en su superioridad en artillería, las primeras señales aparecen en fuentes rusas de que también está comenzando a experimentar la escasez de municiones. Los analistas señalan que es probable que sus incansables intentos de avanzar pronto se detengan “a menos que lleguen pronto nuevos refuerzos significativos y suministros de proyectiles de artillería”. El grupo de mercenarios Wagner, con miles de presos rusos reclutados dentro de sus filas, ha estado enviando oleadas tras oleadas de infantería contra las posiciones ucranianas allí.

Si bien se le ha suministrado todo el equipo militar necesario a pesar de no ser parte del Ejército ruso, el líder de Wagner, Yevgeniy Prigozhin, está compitiendo contra el ministro de Defensa, Sergei Shoigu. Esto complica la coordinación entre varias partes de las fuerzas rusas, ya que diferentes grupos, que también incluyen combatientes chechenos de Ramzan Kadyrov e incluso un nuevo grupo mercenario, afiliado a Shoigu, luchan por separado en diferentes partes del frente. La falta de coordinación y la estructura de mando ineficiente son entre los factores mencionados con frecuencia detrás del fracaso de Rusia para lograr el éxito militar en Ucrania.

Según el último informe del estado mayor general del Ejército ucraniano, Rusia solo ha estado atacando en Bajmut y Avdiivka, mientras en otras partes de la línea de frente se ha estado defendiendo. Según algunas fuentes, los combates están ocurriendo justo al lado del importante enlace logístico entre Kreminna y Svatove en Lugansk. Se estima que Rusia perdió 550 soldados en el día anterior en el combate.

Mientras tanto, en su discurso no anunciado ante el Parlamento de Ucrania, Zelenski subrayó el miércoles que sus principales objetivos eran “restaurar la integridad territorial de Ucrania y liberar a todos los que se encuentran actualmente en cautiverio”. Dijo que casi 1.500 ucranianos ya han regresado a casa como parte de los intercambios de prisioneros de guerra. También mencionó que millones de ucranianos que habían huido de la guerra deberían poder regresar a casa, alentando a los diputados a crear las condiciones necesarias para la inversión internacional en la reconstrucción de posguerra del país.

El presidente de Ucrania se refirió a otro tema apremiante y prometió que el sistema energético del país se reconstruiría siguiendo diferentes principios para garantizar que sea más descentralizado y ecológico. Los ataques recientes de Rusia han demostrado que las grandes ciudades y partes del país no pueden depender de un pequeño número de enormes centrales eléctricas, subrayó Zelenski, quien dijo que en su lugar habría que construir instalaciones generadoras más pequeñas, pero más numerosas.

Los cortes de energía se han acortado recientemente en Ucrania a medida que continúan las reparaciones y llega la asistencia de socios extranjeros. Sin embargo, algunas dificultades no pudieron resolverse ya que los transformadores y otros equipos cruciales, proporcionados por otros países, no pueden ser incorporados rápidamente al sistema energético del país.