Ucrania

Polonia se prepara para la guerra: despliega una nueva División de Infantería con las armas más modernas junto a la frontera con Rusia y Bielorrusia

La nueva unidad militar dispondrá de carros de combate Abrams y K2 estadounidenses y surcoreanos, obuses autopropulsados y drones de reconocimiento y ataque

El ministro de Defensa polaco durante la presentación de la nueva división
El ministro de Defensa polaco durante la presentación de la nueva divisiónLa Razón

Parece claro que Polonia se está tomando muy en serio la posibilidad de una guerra con Rusia o con su vecina Bieolorrusia así como sus planes para convertirse en una superpotencia militar europea. Para ello, lleva años tratando de modernizar sus fuerzas armadas alineándose al resto de países de la OTAN en un proceso que se ha acelerado con la invasión de Ucrania.

El gobierno ultranacionalista del PiS considera que el país se tiene que rearmar lo más rápido posible con la adquisición de nuevos tanques coreanos y estadounidenses, sistemas de defensa antiaérea, aviones de combate F-35 y cientos de obuses. No solo es una cuestión de equipamiento. “Polonia ha tenido que cambiar su enfoque, su estrategia y su actitud de compra”, explicaba el pasado mes de diciembre Marek Swierczynski, director de Seguridad y Asuntos Internacionales del centro de análisis Polityka Insight, en Varsovia.

Las preocupaciones en Polonia ante un posible ataque de Moscú en su territorio han aumentado, máxime teniendo en cuenta que su frontera con Ucrania sirve de puerta de entrada para los equipos militares suministrados a Kiev por Estados Unidos y otros gobiernos europeos. Polonia, además, comparte una frontera con el enclave ruso de Kaliningrado en el norte, y una frontera de casi 400 kilómetros con Bielorrusia, aliado incondicional de Moscú.

Ahora, se ha sabido que sus fuerzas armadas están creando una nueva división, la quinta del Ejército de Tierra polaco, que operará principalmente en el noreste del país. Mariusz Błaszczak, ministro de Defensa y viceprimer ministro, compartió que la recién creada Primera División de Infantería de las Legiones, en homenaje a una unidad que se distinguió durante la guerra polaco-soviética de 1920 y más tarde contra la invasión alemana nazi de Polonia en 1939, estará equipada con el equipo más moderno que tiene el ejército polaco.

Esta nueva 1.ª División estaría estacionada principalmente en la región nororiental de Podlaskie, entre la 16.ª División Mecanizada, que tiene su sede en la provincia de Warmińsko-Mazurskie, al norte, y la 18.ª División Mecanizada, que opera principalmente en la región central de Mazowieckie y la provincia oriental de Lubelskie.

La División, en particular, estará equipada con carros de combate surcoreanos y estadounidenses. “Mientras que la 16.ª División Mecanizada cuenta principalmente con tanques K2 y la 18.ª División de Infantería con carros Abrams, la nueva 1ª División Podlaskie incorporará carros de combate Abrams de fabricación estadounidense y K2 de Corea del Sur, mientras que la brigada de artillería estará equipada con obuses autopropulsados Krab de fabricación polaca, obuses K9 de Corea del Sur y drones de reconocimiento y ataque Gladius también polacos”. Esta división de nueva creación estará compuesta por cuatro brigadas, cada una de las cuales tendrá cuatro batallones.

El ministro de Defensa especificó además que tendría su sede en la ciudad de Ciechanów y desplegaría soldados en localidades como Łomża, Kolno y Siemiatycze.

Este verano, el ministro de Defensa, Mariusz Błaszczak, proclamó que Polonia tendrá “las fuerzas terrestres más poderosas de Europa” gracias a las inversiones del gobierno, que ha elevado el presupuesto de defensa del 2,3% del PIB actual hasta el 3% previsto para el próximo año, siendo este porcentaje uno de los niveles más altos en la OTAN. Pese a todo, el gobierno del PiS quiere situarlo en el futuro cercano al 5%. Una encuesta reciente realizada por IBRiS para el periódico “Rzeczpospolita” señaló que el 76,7% de los encuestados apoya el aumento del gasto militar.

No hay que olvidar tampoco que desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero,la seguridad pasó a ser una prioridad para los países del centro de Europa. La guerra en Ucrania deja a Polonia en primera línea frente a un hipotético ataque ruso. Las advertencias de Vladimir Putin no han pasado inadvertidas en Varsovia, que ha hecho de su objetivo primordial el fortalecimiento de sus Fuerzas Armadas para que estén preparadas para defender el territorio de la Alianza.

En una iniciativa pionera en la Unión Europea, el Gobierno de Ley y Justicia (PiS) lanzó el proyecto «Entrena con el Ejército» dependiente del Ministerio de Defensa. Hasta 17 unidades militares repartidas en todo el país organizan días de entrenamiento para civiles. No existen condiciones previas, solo tener entre 18 y 65 años. Los participantes aprenden a disparar, defensa personal, esconderse con sigilo y esquivar balas enemigas. También supervivencia, creando refugios y purificando agua. Durante un día, quienes se apunten al adiestramiento pueden hacer simulaciones en campos profesionales de entrenamiento militar.

Durante los últimos dos años, el Gobierno polaco se ha mantenido inmerso en un proceso de transformación para renovar sus tropas, instando a sus ciudadanos a alistarse para proteger a la patria. El Ejército anunció que necesitan hombres y mujeres de entre 30 y 40 años para crear una base sólida de reservistas que puedan ser llamados a filas inmediatamente. Polonia puso fin al servicio militar obligatorio en 2009, para alivio de quienes lo vieron como un legado no deseado de la era soviética. El entrenamiento oficial para ser nombrado reservista debe durar al menos cuatro semanas. Durante el último mes, el Gobierno ha estado organizando este tipo de acciones como promoción militar más que como un entrenamiento real.