Abinader vuelve a presidir República Dominicana tras un arrollador triunfo en primera vuelta

No pasaron muchas horas desde el cierre de las mesas cuando ya el presidente Luis Abinader sabía que había sido reelegido en República Dominicana. Con apenas el 21% del escrutinio completado, su más cercano contrincante, el expresidente Leonel Fernández –que sacó 27%–, reconocía el triunfo del conservador, que finalmente logró alrededor del 58% de los votos.

En la sede del partido Revolucionario Moderno en Santo Domingo, Abinader celebró con sus simpatizantes prometiendo no defraudar la confianza de sus electores. «Por encima de cualquier sentimiento partidista está mi lealtad. Soy y seré el presidente de todos los dominicanos y dominicanas», dijo entre vítores.

Anunció que profundizará las políticas que comenzó en 2020, cuando asumió su primer mandato y añadió que buscará una reforma constitucional para evitar que futuros Gobiernos modifiquen las reglas de la reelección para ajustarla a intereses particulares. «Hace cuatro años me presenté ante ustedes con la esperanza de un cambio y ahora lo hago cuando ejecuto ese cambio esperanzador», afirmó. Abinader se comprometió a que este será su segundo y último mandato.

El proceso electoral no tuvo denuncia de irregularidades, y el presidente de la Junta Electoral dominicana, Román Jáquez Liranzo, aseguró que fue «seguro, transparente y abierto al mundo». Hubo 551 observadores internacionales para supervisar las elecciones.

Abidaner ha encabezado una gestión conservadora en su país, capaz de mostrar éxito económico. El crecimiento de los números en República Dominicana se mantuvo incluso después de la pandemia de coronavirus, destacándose en la comparación con el resto de la región. El Ejecutivo tiene buenas relaciones con el empresariado y ha puesto el foco en hacer crecer la industria del turismo en un país que recibió en 2023 diez millones de visitantes.

No obstante, la isla sigue mostrando números de pobreza que, aunque a la baja, siguen siendo punto de atención. En áreas rurales descendió del 30,9% al 24,6% entre 2022 y 2023; mientras que en entornos urbanos descendió del 27% al 22,7% en 2023. De igual forma, tiene retos en materia educativa, donde los indicadores ubican al país en el lugar 146 de 148 países con baja calidad de educación.

Quizás su política más polémica es el muro que separa a su país de Haití, que ocupa la mitad oeste de la isla. Abinader ha dicho que continuará construyéndolo para reducir la migración y controlar el ingreso de haitianos en su país. Los otros candidatos también lo dijeron. Por otra parte, el presidente electo se ha negado a levantar campos de refugiados para quienes huyen de la violencia en Haití y ha incrementado las deportaciones de indocumentados a más de 175.000 en el último año, según cifras del Gobierno dominicano. Son medidas que han sido criticadas por organizaciones de derechos humanos.

Con respecto al Congreso Nacional, el oficialismo obtuvo una mayoría en más de 20 de las 32 regiones del país, lo que le otorgaría una cómoda mayoría para el trámite de los proyectos de ley y las reformas anunciadas.

El presidente Pedro Sánchez felicitó a Abinader por su reelección y mostró su intención de seguir trabajando para fortalecer las «excelentes» relaciones bilaterales entre ambos países.

De empresario millonario a político de éxito

Que Luis Abinader sea millonario de cuna no hace sino mejorar su perfil frente al electorado de República Dominicana. Católico y de familia tradicional, cuenta con un patrimonio de unos 75 millones de dólares. Tiene cementeras, hoteles y una universidad. Es hijo del empresario José Rafael Abinader, quien fue senador de República Dominicana. Con título en Economía del Instituto Tecnológico de Santo Domingo y posgrados en Finanzas y Gerencia en Harvard y Dartmouth College, dio el salto a la política después de dedicarse a las empresas que había fundado su padre. Su primer cargo público fue la presidencia de su país, a la que llegó en 2020.