Turquía

Alemania acusa a Erdogan de apoyar a los terroristas

Se ha convertido en una «plataforma de acción para grupos islamistas»

Militares detenidos ayer por ser sospechosos de participar en el golpe
Militares detenidos ayer por ser sospechosos de participar en el golpelarazon

Berlín acusa a Ankara de apoyar a grupos terroristas en Oriente Medio. Es la alarmante conclusión de un informe del Ministerio del Interior alemán.

Berlín acusa a Ankara de apoyar a grupos terroristas en Oriente Medio. Es la alarmante conclusión de un informe del Ministerio del Interior alemán publicado por la cadena de televisión ARD. El documento concluye que Turquía es una «plataforma de acción» para organizaciones consideradas como «terroristas» por EE UU y la UE. El informe, basado en las estimaciones del Servicio Federal de Inteligencia alemán (BND), subraya la «afinidad ideológica» existente entre el partido del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y estas organizaciones, dadas sus «numerosas expresiones y acciones de solidaridad y de apoyo» hacia ellas. Se citan el movimiento palestino Hamas, los Hermanos Musulmanes y los grupos islamistas en Siria.

Si bien la sospecha no es nueva –en 2014, Hamas trasladó su sede a Estambul y Erdogan ha recibido en varias ocasiones a su líder–, el hecho de que Alemania reconozca oficialmente, por primera vez, el vínculo amenaza con desatar otra tormenta diplomática entre ambas naciones. Turquía no ha tardado en reaccionar y lo ha hecho ofendido. «Estas acusaciones son una nueva manifestación de la mentalidad retorcida que intenta debilitar a nuestro país», manifestó el ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavosoglu, además de exigir una aclaración de Berlín. Las relaciones entre Alemania y Turquía, dos naciones clave en la resolución de la crisis migratoria, se han deteriorado notablemente en los últimos meses y Ankara aún no ha perdonado que las autoridades germanas no permitieran la intervención de Erdogan durante una manifestación en Colonia, días después del intento de golpe en Turquía.

Esta filtración ha aumentado los recelos de la población alemana hacia el acuerdo migratorio entre Turquía y la UE. En las últimas semanas, se han multiplicado las voces que piden un distanciamiento del presidente islamista (el 90% de los alemanes se opone a un acercamiento a Turquía), e incluso reclaman una ruptura del pacto.

Las consecuencias de este informe no se limitan al ámbito internacional, sino que también desataron una crisis en la Gran Coalición del Gobierno. El informe se elaboró de forma confidencial por el Ministerio del Interior, dirigido por la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Angela Merkel, y lo hizo a espaldas del Ministerio de Exteriores, que encabeza el político socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier. Dos partidos que gobiernan juntos desde 2013 y a los que les conviene transmitir una imagen de unidad a menos de trece meses de unas elecciones generales marcadas por el rápido avance de partidos populistas y antiinmigración. Esta falta de coordinación fue achacada, según un portavoz de Interior, a «un error burocrático».

El partido de La Izquierda en la oposición, quien pidió el informe, acusó al Gobierno de vender una imagen positiva de Turquía por sus propios intereses. Sin embargo, las últimas acciones del Ejecutivo apuntan a que se seguirá considerando a Ankara como un importante socio tanto en la crisis de los refugiados como en la lucha contra el Estado Islámico.

Más de 800 alemanes en las filas del EI

El mismo informe revelado ayer muestra un aumento de simpatizantes a la organización terrorista Estado Islámico que abandonan Alemania para luchar en sus filas. Hasta finales de julio, se han contabilizado 840 personas que salieron del país para unirse a los yihadistas en Siria e Irak, lo que supone un aumento de una veintena de combatientes. Un cuarto de éstos (aproximadamente 210) son ciudadanos turcos o tienen raíces turcas y la gran mayoría son menores de 30 años. De todos los que se fueron, los servicios de Inteligencia calculan que un tercio pudieron regresar a Alemania.s