México

López Obrador amenaza con no ir a la Cumbre de las Américas si excluyen a Maduro

La ausencia del presidente mexicano sería un golpe para la reunión en la que se espera que trate fuertemente el tema de la migración en la frontera entre Estados Unidos y México

MEX3544. CIUDAD DE MÉXICO (MÉXICO), 10/05/2022.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ofrece una rueda de prensa matutina hoy, en el Palacio Nacional, en Ciudad de México (México). López Obrador avisó este martes que podría no asistir a la Cumbre de las Américas, programada para junio próximo en California, si Estados Unidos no invita a todos los países re la región. EFE/ Isaac Esquivel
MEX3544. CIUDAD DE MÉXICO (MÉXICO), 10/05/2022.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ofrece una rueda de prensa matutina hoy, en el Palacio Nacional, en Ciudad de México (México). López Obrador avisó este martes que podría no asistir a la Cumbre de las Américas, programada para junio próximo en California, si Estados Unidos no invita a todos los países re la región. EFE/ Isaac EsquivelIsaac EsquivelAgencia EFE

El presidente de México dijo el martes que no asistirá a la Cumbre de las Américas del próximo mes en Los Ángeles si el gobierno de Biden excluye a Cuba, Venezuela y Nicaragua, sumando su voz a las crecientes advertencias de un boicot por parte de algunos líderes de la región.

El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho en las últimas semanas que el gobierno de Estados Unidos no debería excluir a nadie de la cumbre, pero no había amenazado previamente con quedarse en casa.

“Si excluyen, si no se invita a todos, va a ir un representante del gobierno mexicano, pero yo no lo haría”, dijo López Obrador durante su conferencia de prensa diaria, recién llegado de una visita a Cuba. Dijo que iría su secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.

La ausencia del presidente mexicano sería un golpe para la cumbre que se espera que trate fuertemente el tema de la migración en la frontera entre Estados Unidos y México. El gobierno de Biden ha trabajado durante meses para construir un consenso regional. Los miembros del gabinete han visitado la región instando a los aliados a reforzar los controles de inmigración y a ampliar sus programas de asilo.

“Nuestro objetivo es... firmar una declaración regional sobre migración y protección en junio en Los Ángeles, cuando Estados Unidos acoja la Cumbre de las Américas”, dijo el presidente Joe Biden en marzo, cuando recibió al presidente de Colombia, Iván Duque, en la Casa Blanca.

Pidió “un nuevo marco de cómo las naciones de toda la región pueden gestionar colectivamente la migración en el hemisferio occidental”.

Esta cooperación será fundamental cuando Estados Unidos se enfrente al problema del elevado número de inmigrantes que llegan a su frontera meridional y se prepare para levantar la restricción de las solicitudes de asilo a finales de este mes, lo que se espera que atraiga aún más inmigrantes hacia el norte.

Pero los líderes de las naciones caribeñas también han discutido un boicot colectivo a la cumbre si los países son excluidos y criticaron el plan de Estados Unidos de invitar al líder de la oposición venezolana Juan Guaidó. Estados Unidos lo reconoce como presidente legítimo de ese país, pero muchas naciones caribeñas no lo hacen.

“No creemos en la política de ostracismo de Cuba y Venezuela. No reconocemos a Juan Guaidó como presidente de Venezuela. En esas circunstancias, Antigua y Barbuda no participará”, dijo el primer ministro de ese país, Gaston Browne.

Dijo que en la reunión de ministros de Asuntos Exteriores del Caribe celebrada en Belice en marzo había surgido un consenso para boicotear la cumbre si los países eran excluidos, “pero no estoy seguro de que el consenso se mantenga.”

El primer ministro de San Vicente, Ralph Gonsalves, tuvo una opinión similar: “Si Guaidó va en representación de Venezuela, si los estadounidenses lo hicieran sería un acto de locura”, dijo Gonsalves en un programa de radio del fin de semana, afirmando que San Vicente podría no asistir si el presidente venezolano Nicolás Maduro es excluido.

Cuba es un miembro activo de la Comunidad de naciones del Caribe y la isla, gobernada por los comunistas, ha proporcionado miles de becas gratuitas a estudiantes caribeños de medicina, ingeniería y otros, desde mediados de los años 70. Los sucesivos gobiernos venezolanos han ayudado a los países caribeños con viviendas prefabricadas y petróleo barato.

Un alto funcionario de la administración Biden dijo que el contragolpe es en gran medida una postura en respuesta a un fuerte impulso diplomático de Cuba -una piedra de toque perenne para la izquierda latinoamericana- y que Estados Unidos espera que pocos líderes cumplan sus amenazas de no asistir a la cumbre.

Entre bastidores, varios líderes caribeños señalaron que planean asistir, según el funcionario, que habló bajo condición de anonimato para discutir las comunicaciones diplomáticas privadas.

El funcionario dijo que la administración espera que tanto López Obrador como el brasileño Jair Bolsonaro asistan.

Cuba fue excluida de las primeras seis cumbres hemisféricas, celebradas entre 1994 y 2012. Pero Cuba fue invitada a la reunión de 2015 en Panamá tras las crecientes amenazas de boicot por parte de los líderes latinoamericanos de izquierda si era excluida, así como por el deshielo de las relaciones con Estados Unidos bajo el presidente Barack Obama, quien se reunió con el líder cubano Raúl Castro en el evento.

Cuba también fue invitada a la última cumbre en Perú en 2018, pero Castro envió a su canciller en su lugar porque el venezolano Maduro no había sido invitado. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tampoco asistió.

Argentina, que actualmente ostenta la presidencia rotatoria de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, también hizo un llamamiento este mes para evitar la exclusión de ningún gobierno.

En un tuit, calificó la cumbre como “una gran oportunidad para construir un espacio de encuentro en el que participen todos los países del hemisferio” e instó a los organizadores a “evitar exclusiones que impidan tener todas las voces del hemisferio dialogando y siendo escuchadas.”