Latinos y pobres: Así es Uvalde, el pueblo de la masacre en Texas donde 9 de cada 10 niños son hispanos

La Escuela Primaria Robb, en el condado de Uvalde (Texas) se encuentra de luto tras la muerte de 19 niños y dos maestras en el tiroteo que tuvo lugar este martes a manos de un joven de 18 años llamado Salvador Ramos, quien abandonó su vehículo y entró en el centro educativo con una pistola y posiblemente un rifle.

Salvador fue abatido por la policía después de haberse atrincherado en el interior de la escuela, donde estaban registrados un total 535 estudiantes, siendo el 90% de ellos de origen latinoamericano, según “The New York Times”. Asimismo, el diario estadounidense añadió que el 87% de los estudiantes son de familias desfavorecidas.

Ubicado a unos 135 kilómetros al oeste de San Antonio, Uvalde es un pequeño pueblo de Texas de 15.000 habitantes con una comunidad fuertemente latina: un 72% de sus habitantes se identifican como hispanos, según el último censo de 2021, seguido de un 25% de blancos y un 1.3% de afroamericanos. Un 19% de la población se encuentra en la línea de pobreza, con escasos recursos económicos, y la media de ingresos por hogar es de 45.936 dólares (unos 43.000 euros) al año.

En el portal web de la ciudad, el gobierno describe a este pueblo como una comunidad entre “la encrucijada de culturas con nuestro idioma y costumbres siendo una mezcla de elementos mexicanos, españoles, ingleses y alemanes”. En algún momento, Uvalde fue conocida como la capital de la miel, su afición al futbol americano, pero también como el pueblo natal del actor Matthew McConaughey.

La comunidad vive principalmente del cultivo de hortalizas durante todo el año: desde espinacas en el otoño hasta repollo y zanahorias en el invierno, así como cebollas en la primavera.

Por su ubicación geográfica, se trata de una de las ciudades de paso de los miles de migrantes que cruzan a diario desde México buscando refugio en Estados Unidos. En abril de este año, el alcalde de Uvalde, Don MacLaughlin, manifestó que estaba muy preocupado con la eliminación del Título 42, la medida sanitaria que permite las deportaciones exprés en toda la frontera sur. Era uno de los partidarios de usar el argumento de invasión para atender la crisis de migrantes.

Un familiar de uno de los niños de la escuela y que ha vivido en la ciudad durante 30 años, explicó al periódico “The Texas Tribune” que la gente de Uvalde “es una comunidad muy fuerte”. “Es un buen lugar para vivir y formar una familia… Ahora, nuestro pequeño pueblo estará en todo el mundo”, aseguró Manny González.

Por su parte, Mary Fowler, de 64 años y abuela de uno de los alumnos que se encontraba en el interior de la escuela cuando se produjeron los hechos, asegura al medio que la ciudad trataba de recobrar el ritmo tras el parón que produjo la covid-19.

“No somos la ciudad más rica. Todo el mundo está luchando, y empezaba a sentir que nos volvíamos a poner de pie. Va a ser duro”, indicó Fowler. También afirmó que la población que “es una comunidad pequeña realmente buena” y que no podía creer que esto haya pasado aquí: “Simplemente no puedo”.