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Así es la bomba nuclear que EE UU retira de su arsenal, 80 veces más potente que la lanzada sobre Hiroshima

Washington alega un creciente número de limitaciones debido a sus capacidades y, por tanto, de un aumento en los costes de mantenimiento

Carcasa de una bomba nuclear B83
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El Departamento de Defensa estadounidense ha decidido este jueves retirar de su arsenal el arma nuclear B83-1, la bomba de caída libre más poderosa de Estados Unidos, alegando un creciente número de limitaciones debido a sus capacidades y por tanto de un aumento en los costes de mantenimiento.

La decisión tiene lugar después de que el Pentágono haya continuado con su programa de sustitución de las ojivas nucleares cuya vida útil requiere de reemplazos, momento en el que las autoridades estadounidenses han determinado un alto coste para mantener el arma B83-1.

 

“Aunque el arsenal nuclear de Estados Unidos sigue siendo seguro y eficaz, la mayoría de los sistemas de disuasión nuclear están funcionando más allá de su vida útil original (...). La bomba de caída libre B83-1 se retirará debido a las crecientes limitaciones de sus capacidades y al aumento de los costes de mantenimiento”, ha detallado el Departamento de Defensa en un comunicado.

La bomba atómica B-83 de clase megatón fue desarrollada en el Laboratorio Livermore en la década de 70 y adoptada por la Fuerza Aérea de los EE UU en 1983, siendo uno de los principales tipos de armas nucleares durante mucho tiempo.

Los portaaviones del B-83 eran tanto bombarderos estratégicos B-1B, B-2, B-52H, como cazas F-15E, F-16 y F/A-18A. El peso total de la bomba es de aproximadamente 1100 kilos, y sus dimensiones 3,67 metros de largo y 45,7 centímetros de diámetro.

Asimismo, el B-83 posee una carga termonuclear de potencia variable hasta 1,2 megatones, unas 80 veces la potencia de la bomba atómica Little Boy que se lanzó sobre Hiroshima en el verano de 1945, y cuenta con un sistema de frenado de paracaídas diseñado para permitir que el portaaviones se aleje mucho antes de dispararse.

Por otro lado, el Gobierno estadounidense ha anunciado la retirada del programa de misiles de crucero lanzados desde el mar con armas nucleares, que se creó en un principio para fortalecer la disuasión de armas nucleares en un conflicto regional (SLCM-N).

“Hemos llegado a la conclusión de que el SLCM-N ya no era necesario”, ha afirmado un funcionario del Departamento de Defensa, sosteniendo que la postura estadounidense de disuasión era “firme”, motivo por el que Rusia no se atrevería a atacar a la OTAN.