Defensa

¿Por qué el USS Zumwalt, el "destructor más avanzado del mundo", se considera un fracaso de la Armada estadounidense?

Estados Unidos apostó por este buque furtivo con alta tecnología, pero ha retirado su apoyo al programa

Estados Unidos gasta año tras año una buena parte de su Producto Interior Bruto (PIB) en mantener o mejorar su posición como potencia militar. En la carrera armamentística, la Armada estadounidense ha presentado numerosas novedades e inversiones, mostrando drones, buques de guerra, portaaviones o tanques para hacer frente a otras potencias como Rusia, China o Corea del Norte. Una de sus últimas aportaciones ha sido el destructor de clase Zumwalt, concebido como el futuro norteamericano y considerado como el barco más avanzado del mundo, aunque para muchos, ha sido un importante fracaso.

El Zumwalt fue diseñado como un buque furtivo destinado a marcar un antes y un después en la historia naval, y era uno de los conceptos incluidos en el programa de investigación y desarrollo de nuevos barcos de guerra SC21. Con 182 metros de eslora y 24 metros de manga, alcanza una velocidad máxima de 30 nudos y puede transportar hasta 158 tripulantes. También tiene un radar multifunción AN/SPY-3 y un radar de vigilancia de volumen hemisférico, que puede rastrear aviones y misiles de alta velocidad.

El USS Zumwalt, la gran apuesta de la Armada de Estados Unidos que no termina de encajar pese a su alta tecnología

Un 40% más grande que el Arleigh Burke, y su sección transversal de radar era comparable a la de un pesquero. Washington sacaba pecho anunciando este "destructor de misiles guiados multipropósito con capacidades furtivas", diseñado para misiones de sigilo y con capacidad para participar en tareas de defensa antiaérea, atacar objetivos a nivel de superficie y brindar apoyo naval. Se implementaron medidas para reducir aún más la visibilidad del Zumwalt, instalando una cubierta que hacía al buque más difícil en detectar.

“Zumwalt es hoy una maravilla técnica. Cuando se despliegue, nuestra nación tendrá un destructor de múltiples misiones con el sigilo y el poder de combate para asumir las misiones más desafiantes”, dijo el capitán James A. Kirk, primer oficial al mando, en un comunicado de prensa en el que destacaba las cualidades del navío. La Marina de Estados Unidos aseguraba que su sistema de propulsión genera 78 megavatios de potencia, casi lo que genera un portaaviones de propulsión nuclear.

Pese a su avanzada tecnología, y de una inversión de unos 4.400 millones de dólares, el coste total del programa aun así ha sufrido numerosos sobrecostes. Una ambiciosa apuesta que, sin embargo, se quedó grande, y es que la Armada ha retirado su apoyo al programa Zumwalt y solicitó detener la entrega del buque, pues a día de hoy, solo se han entregado tres de los treinta y dos previstos originalmente. No obstante, en febrero, la Marina de Guerra estadounidense afirmó que tiene previsto llevar a cabo una prueba de misiles hipersónicos disparados desde el destructor en diciembre de 2025. Los requisitos para el sistema de combate integrado utilizado para lanzar el hipersónico de la clase Zumwalt informarán cómo la Marina coloca e integra armas hipersónicas en los submarinos de ataque de la clase Virginia, según dijo el capitán Tyson Young de la oficina ejecutiva del programa para el Sistema Integrado de Combate Zumwalt en el Simposio anual de Sistemas de Combate de la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Navales, según informó News.USNI.org.