El Supermartes decidirá la coronación de Trump como candidato republicano

Míchigan, Missouri y Idaho refuerzan a Donald Trump como el favorito de los republicanos para enfrentar al presidente Joe Biden en la elección general. En las últimas horas, el expresidente arrasó en tres eventos del partido, capturando ya más de 240 delegados. Su rival más cercana en esa disputa interna, Nikki Haley, no supera los 24 delegados contando todas las citas electorales disputadas hasta el momento. «Hemos despegado como un cohete hacia la nominación republicana. Hoy acabamos de obtener números que fueron increíbles», dijo Trump en un mitin. Y siguió: «pero hoy parece que estamos ganando cerca del 100% tanto en Missouri como en Michigan. ... Esto se está convirtiendo en una locura. ¿Verdad? Esto se está convirtiendo en una locura. Y es un gran honor», sentenció el exmandatario que divide este calendario electoral con varios compromisos judiciales.

Las contiendas de este fin de semana llegan antes de este martes, 5 de marzo, cuando 15 estados podrían sellar potencialmente el destino de las primarias republicanas en el Supermartes. Antes, deberán conocerse resultados del Distrito de Columbia -el único que podría inclinarse a Haley hasta ahora-, y el desenlace de los caucus de Dakota del Norte.

De cara al Supermartes las apuestas son que se confirmará lo evidente: Estados Unidos estaría condenado a una revancha entre Biden y Trump. Este día es crucial porque marca el punto de inflexión más amplio hasta las llamadas Convenciones Nacionales donde tanto demócratas como republicanos oficializan candidato. El dinero -sustancial para ganar cualquier campaña- está en juego porque los donadores abandonarán a los perdedores. El analista político Ricardo Amado explica que efectivamente «un buen resultado en esta jornada puede inyectar vitalidad a una campaña presidencial, atrayendo un mayor apoyo financiero y creando impulso. Por el contrario, un resultado mediocre puede detener bruscamente el progreso de una campaña», asegura. Millones de votantes depositarán su voto no solo para las primarias presidenciales y caucus de más de una docena de estados, pero también el programa incluye las elecciones a las dos cámaras del Congreso estadounidense -la Cámara de Representantes y el Senado-, así como otras contiendas.

El presidente Joe Biden se enfrenta a una oposición mínima en las filas demócratas y tiene prácticamente asegurada la nominación del partido. De acuerdo con Amado, más que una «lucha interna azul el mandatario enfrenta un referendo sobre su propio gobierno». Según una mayoría de encuestas, los estadounidenses no están felices con el manejo de la economía, la edad del presidente o su apoyo incondicional a Israel en el conflicto contra el grupo Hamás. Por su parte, la carrera por la nominación presidencial republicana del Supermartes puede marcar el final de la campaña de la ex embajadora ante las Naciones Unidas Nikki Haley.

Este año, en el Supermartes, estarán en lista 874 delegados republicanos, que representan aproximadamente el 36% del total disponible. Para hacerse con la nominación republicana, un candidato debe conseguir un mínimo de 1.215 delegados de los 2.429 totales.

En el frente demócrata, el Supermartes del martes tiene en juego 1.439 delegados de los 3.979 totales del partido, lo que subraya la importancia de estos concursos para determinar el camino hacia la nominación del partido.

Origen de la cita

Según explica el profesor de Historia de la Universidad de Georgetown, Erik Langer, los orígenes del término son algo confusos, con indicios que se remontan «al menos a 1976, cuando “supermartes” se refería a las últimas primarias importantes de junio: California, Nueva York y Ohio», asegura. Sin embargo, en general se acepta que el Supermartes adoptó su forma moderna en 1988.

De acuerdo con el académico, «ese año, una coalición de demócratas de los estados del sur de EE UU optó por adelantar el proceso de primarias presidenciales tras la decisiva victoria del presidente republicano Ronald Reagan cuatro años antes contra el candidato demócrata Walter Mondale». La idea de esta jugada, continúa Langer, «consistía en celebrar primarias simultáneas a principios del ciclo electoral, con el objetivo de ejercer una mayor influencia en la elección de su partido y garantizar la viabilidad del candidato en el Sur de Estados Unidos», dice. Pero a pesar del documentado fracaso de la iniciativa de 1988, el Supermartes sigue siendo el día en que la mayoría de los estados del país sus elecciones primarias.

Ni Biden ni Trump son ajenos a la importancia de esta jornada. En el pasado ellos mismos sellaron sus opciones este día. En la carrera demócrata de 2020, por ejemplo, la impresionante actuación del hoy mandatario en el Supermartes, con victorias en 10 estados, le propulsó a una competición a dos con el senador Bernie Sanders, quien iba muy por delante antes de este acontecimiento.

En relación a Trump, en 2016 el senador por Texas Ted Cruz (supuesto favorito entonces) sufrió vergonzosa una decepción en esta fecha, mientras que un aspirante nuevo y sin mucho apoyo del partido como Trump, superó las expectativas, preparando el terreno para su eventual victoria presidencial ese año. Ricardo Amado explica, sin embargo, que este año dada la naturaleza menos competitiva de la elección, puede que el Supermartes sea solo una «crónica de una muerte anunciada». Haley ha expresado su intención de persistir en la carrera al menos hasta esta fecha. Sin embargo, sus planes más allá de ese momento siguen siendo inciertos. «No voy a abandonar esta lucha cuando la mayoría de los estadounidenses desaprueban tanto a Donald Trump como a Joe Biden», dijo la exgobernadora de Carolina del Sur tras perder las primarias en su propio estado hace unas semanas. Los estados en disputa son: Alabama, Alaska, Arkansas, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee, Texas, Utah, Vermont, Virginia y el territorio de Samoa.