Arrestan a 22 policías municipales por ataques a estudiantes en sur de México

La Fiscalía del estado mexicano de Guerrero arrestó hoy a 22 policías de la ciudad de Iguala por su "presunta responsabilidad"en los ataques a tiros en los que murieron seis personas en la noche del viernes y la madrugada el sábado.

La Fiscalía del estado mexicano de Guerrero arrestó hoy a 22 policías de la ciudad de Iguala por su "presunta responsabilidad"en los ataques a tiros en los que murieron seis personas en la noche del viernes y la madrugada el sábado.

La Procuraduría de Justicia de Guerrero precisó en un comunicado que los 22 agentes policiales municipales fueron trasladados hoy "por cuestiones de seguridad"a sus instalaciones en Acapulco, en el Pacífico mexicano.

Agregó que esta medida se tomó después de que los familiares de los policías realizaran protestas para impedir que fueran enviados a la sede de la Fiscalía en Chilpancingo, capital del estado.

Las autoridades indicaron que fue necesario solicitar el apoyo de las Fuerzas Armadas para trasladar a los agentes detenidos con el fin de que rindan sus declaraciones sobre los hechos violentos en Iguala.

Las Fuerzas Armadas desarmaron y arrestaron ayer sábado a los 280 policías municipales de Iguala como medida preventiva para esclarecer los hechos violentos, aunque por la noche dejaron en libertad a 258 de ellos, que permanecen acuartelados, pero no detenidos.

Iguala es vigilada desde ayer por las policías estatal y federal y por militares que mantienen puestos de control en las entradas de la ciudad.

Asimismo, el Servicio Médico Forense entregó esta mañana los cuerpos de los tres estudiantes fallecidos en los hechos de las últimas horas, os cuales son trasladados hacia Chilpancingo.

La noche del pasado viernes, policías municipales de Iguala persiguieron a tiros y detuvieron tres autobuses tomados por un grupo de estudiantes de la escuela de Ayotzinapa, en ese estado, lo que dejó varios heridos de bala.

Unas horas más tarde los estudiantes fueron atacados a tiros por un grupo de personas armadas, supuestamente policías municipales, cuando informaban a un grupo de reporteros, ataque en el que murieron dos jóvenes.

Minutos después, en la carretera entre Iguala y Chilpancingo otro grupo de civiles no identificados disparó contra un autobús donde viajaban miembros del equipo de fútbol de tercera división Avispones de Chilpancinco, incidente en el que falleció un deportista.

También murieron una mujer que viajaba en un taxi y el conductor del autobús, quien falleció mientras era trasladado al hospital.

Durante la mañana del sábado, las autoridades localizaron el cuerpo de un joven que fue arrojado cerca del lugar donde ocurrió el primer tiroteo.

Las autoridades del estado de Guerrero tomaron el control de la ciudad y comenzaron una investigación de los hechos violentos.