Así fue la compleja operación militar de rescate para sacar a dos rehenes israelíes de Gaza

Alivio y alegría. Israel vive este lunes un nuevo impulso de esperanza tras la liberación de dos rehenes (los argentinos Fernando Marman, de 61 años, y Louis Har, de 70) en el sur de Gaza, en Rafah, junto a la frontera con Egipto, tras una compleja operación de las fuerzas especiales nocturnas supervisada en todo momento por el primer ministro, Benjamín Netanyahu. Se trata de la primera liberación de secuestrados por Hamás con final feliz en varios meses.

La misión de las tropas hebreas estaba planeada con mucha antelación y los mandos militares habían programado la ejecución de la misma en varias ocasiones, todas ellas desechadas porque no se cumplían "las condiciones para llevarla a cabo ", declaró el portavoz de las fuerzas armadas, Daniel Hagari. La incursión fue llevó a cabo de forma simultánea por el Ejército, la Policía y los servicios secretos israelíes, con apoyo aéreo. Sobre el terreno estaba desplegada la 98.ª división, formada por paracaidistas y la 13ª brigada la Shayetet 13, una unidad de élite de la marina israelí, además de 7.ª brigada blindada. Todo ellos estuvieron acompañados por agentes del Shin Bet -el servicio de inteligencia nacional de Israel- y la unidad antiterrorista especial Yamam de la policía.

Harari explicó que en realidad se trató de una "operación relámpago" basada en información de inteligencia extremadamente sensible y valiosa de la Dirección de Inteligencia Militar y del Shin Bet. Al parecer, las tropas israelíes consiguieron "distraer" con ataques aéreos al enemigo de Hamás dando pie así a una operación terrestre que se inició exactamente a la 01:49 horas. Las fuerzas especiales irrumpieron “con explosivos” en el edificio en Rafah donde se encontraban los dos rehenes, custodiados en ese momento por tres terroristas armados mientras otros combatientes de Hamás hacían guardia en los edificios contiguos.

Cuando los soldados israelíes entraron en la habitación, dispararon contra los captores y protegieron en todo momento con sus cuerpos a los dos rehenes en medio de violentos intercambios de disparos. Solo un soldado resultó levemente herido, pero ninguno murió en el asalto. En total fueron algo menos de sesenta segundos para sacar a los secuestrados, que fueron llevados gracias al apoyo aéreo a un lugar seguro y después al hospital Chaim Sheba, el más grande de Israel. Según Hamás, al menos 52 palestinos murieron en estos ataques.

Al final de su declaración, Hagari también se dirigió a los rehenes restantes que aún se encuentran en cautiverio de Hamás. "Además de la emoción después de la exitosa operación de rescate, no olvidamos ni por un momento que en Gaza todavía están retenidos 134 rehenes. Quiero dirigirme a ustedes esta mañana: si me escuchan, sepan que estamos decididos a traerlos de regreso a casa. No perderemos ninguna oportunidad de traerlos de regreso a casa".