Guerra en Gaza

Así es la zona tapón en la frontera con Gaza: Egipto se blinda ante la inminente incursión israelí en Rafah

Muros de hormigón de siete metros de altura, extensión de 21 km cuadrados y espacio para casi 100.000 personas

Soldados palestinos hacen guardia junto a un puesto fronterizo egipcio en el Sinaí
Imagen de archivo. Soldados palestinos hacen guardia junto a un puesto fronterizo egipcio en el Sinaílarazon

El Egipto de Abdel Fattah El Sisi comenzó a construir la pasada semana una zona de seguridad rodeada por muros de hormigón de hasta siete metros de altura en el extremo norte del desierto del Sinaí, cerca de la frontera con la Franja de Gaza, según las imágenes por satélite publicadas por Maxar Technologies y otras compañías.

La Fundación Sinaí para los Derechos Humanos reveló entonces varias imágenes y proporcionó algunos detalles relacionados con las obras, que habían empezado a primera hora del pasado 12 de febrero bajo la dirección del empresario egipcio Ibrahim Al-Arjani. Las labores de construcción del recinto, cerrado a cal y canto, continúan a velocidad de crucero como forma de «precaución» ante lo que está por venir.

El plazo dado por las autoridades no excedía los 10 días. Y es que El Cairo teme el desplazamiento masivo de palestinos hacia la península del Sinaí en los próximos días o semanas como consecuencia de la incursión israelí en Rafah, la ciudad de 55 kilómetros cuadrados donde se hacinan más de 1 millón y medio de gazatíes, en su mayoría desplazados internos que llevan casi cinco meses huyendo de unos combates en los que han muerto más de 29.000 personas, según las cifras proporcionadas por el Ministerio de Salud gazatí.

El corredor de Rafah es la única vía para entrar y salir de Gaza que Israel no controla. La zona de seguridad fortificada que Egipto está construyendo podría servir para refugiar a cientos de miles de palestinos. El espacio, cuya extensión ronda los 21 kilómetros cuadrados, según las primeras estimaciones, tiene capacidad para albergar a más de 100.000 personas, informa The Wall Street Journal.

Rafah, Gaza
Rafah, GazaTania NietoLA RAZÓN

Además, Egipto concentra en las inmediaciones de esa «zona tapón» soldados y material militar para blindarse ante las posibles consecuencias de una operación militar terrestre en Rafah, «el último bastión de Hamás» que queda en pie en la Franja de Gaza, en palabras del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

El régimen de El Sisi guarda silencio. Por el momento, el gobernador militar del Norte del Sinaí, Mohamed Shousha, ha negado que Egipto esté preparando un área para encapsular a los refugiados palestinos a pesar de las numerosas evidencias. El Alto Comisionado de la ONU, Filippo Grandi, ya declaró a la agencia Reuters que el eventual desplazamiento masivo de gazatíes desde Rafah hacia el Sinaí egipcio sería «un desastre» para los palestinos y para las perspectivas de paz en Oriente Próximo. Aunque el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, asegura que entre los planes de su gabinete de guerra no están los de «evacuar a civiles palestinos a Egipto».

En cambio, Israel ha dejado claro que quiere «limpiar de civiles» Rafah antes de invadir y, además, tomar el control de la llamada Ruta Philadelphi, la zona fronteriza fortificada entre Gaza y Egipto. El Cairo, sin embargo, ha amenazado con tumbar el tratado de paz que ambos países firmaron hace cuatro décadas.

El pulso continúa. Las Naciones Unidas han acusado a Israel de querer construir su propia zona tampón en el interior de Gaza, un plan que, en caso de efectuarse, como pretenden las autoridades hebreas, reduciría de forma sustancial las fronteras del enclave palestino. El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, dijo a principios de febrero que el Ejército israelí había estado destruyendo edificios de Gaza «que se encuentran a menos de un kilómetro de la valla entre Israel y Gaza, despejando la zona con el objetivo de crear una “zona tampón”».