Guerra de Gaza

El baile de cifras con la ayuda humanitaria en Gaza

Autoridades locales y la ONU denuncian que la ayuda es insuficiente y su reparto, caótico

Israel anuncia un nuevo mecanismo para "ampliar el alcance" de la ayuda humanitaria en Gaza
Israel anuncia un nuevo mecanismo para "ampliar el alcance" de la ayuda humanitaria en GazaEuropa Press

El anuncio del Ejercito israelí, el pasado 27 de julio, de una «pausa táctica» diaria de diez horas en su actividad militar para permitir la distribución de ayuda en Gaza fue acogida con un mínimo de alivio reclamado con cada vez más fuerza ante la crisis por la escasez de alimentos.

Según el último recuento de las autoridades sanitarias locales, publicado este pasado lunes, al menos 180 personas han fallecido en Gaza por hambre o desnutrición desde el comienzo de la guerra, incluidos 94 menores.

Desde el Gobierno de Israel aseguran que están haciendo todo lo posible para suministrar la ayuda, mientras que el Gobierno palestino y organismos como la ONU denuncian que la misma está siendo insuficiente.

El baile de cifras ofrecido por unos y otros es difícil de contrastar ante el veto impuesto por Israel a la entrada de la prensa internacional en la Franja de Gaza. Buen ejemplo de ello es el reporte ofrecido este pasado martes. El Gobierno de Gaza denunció que solo 95 camiones de ayuda humanitaria ingresaron el lunes a la Franja y que «la mayoría» fueron saqueados debido al caos de seguridad «provocado por Israel» durante el proceso de distribución. Por su parte, el organismo israelí encargado de coordinar los asuntos civiles en los territorios palestinos ocupados, COGAT, elevó la cifra a más de 300.

En febrero de 2025, pese a las críticas de Naciones Unidas y ONG con presencia en la zona, Israel creó, con apoyo de Estados Unidos, la Fundación Humanitaria Gaza (GHF) para gestionar la distribución de ayuda en Gaza. Este pasado martes, veinticinco relatores y expertos de Naciones Unidas pidieron su desmantelamiento alegando que dicha fundación es un ejemplo «de cómo la asistencia humanitaria puede ser explotada para agendas militares y geopolíticas encubiertas». También subrayaron «la urgente necesidad de una supervisión y acción internacional robusta bajo los auspicios de la ONU» y recordaron que fuerzas israelíes habían disparado contra personas que intentaban acceder a los puntos de distribución operados por la GHF.

Mientras fuentes de diversos centros sanitarios aseguraron este pasado martes haber recibido 25 muertos por fuego israelí, de los cuales 14 eran personas que se disponían a buscar comida, el COGAT anunció que permitirá que comerciantes locales de Gaza introduzcan mercancía en la Franja para «aumentar el volumen de ayuda» que accede al enclave, asegurando que así, pretenden reducir «la dependencia de la recogida de ayuda por parte de la ONU y las organizaciones internacionales», a las que acusa de no acudir al lado gazatí de la frontera con Israel para coger y distribuir el contenido de los camiones que llevan a Gaza. Las agencias de la ONU y estas organizaciones, por su parte, denuncian los riesgos que corren sus equipos (atravesando zonas de combate) para recogerlos.