Política

Caracas

Capriles: «No queremos un golpe de Estado»

El líder de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles, ha asegurado que la coalición opositora "no quiere golpe de Estado", a pesar de que el Gobierno dice que ese era el objetivo de la ola de violencia que se desató ayer en Caracas dejando un saldo de tres muertos y 66 heridos. Así lo ha afirmado en la rueda de prensa que ha ofrecido este jueves, explicando que "la resistencia no crece si continuamos llamando a salidas que no nos llevan a ningún lado". "Nosotros elegimos un camino que para algunos es muy largo, pero que es seguro: meternos en el corazón de los venezolanos", ha dicho.

En esta línea ha vuelto a condenar los disturbios capitalinos. "Y lo voy a seguir haciendo porque, aunque hay gente que me ataca porque no soy violento, las bolas o la valentía no se ven por quién hable más duro o tire más piedras, es el que con sus pensamientos y sus ideas cambia los modos de pensar", ha afirmado.

Capriles ha instado al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a hacer lo mismo y "deslindarse de los grupos armados"por el Gobierno. "Porque (lo utilizado ayer en Caracas) no eran perdigones ni gases, eran armas de fuego", ha insistido.

"Nos piden que nos deslindemos de la violencia, pero no necesitamos un llamamiento para hacerlo, sino que lo hacemos porque es nuestra convicción. Cuándo van a desarmar a los grupos anárquicos que salen a agredir a mujeres y estudiantes, también queremos verlo", ha urgido.

El líder opositor ha denunciado que "hay videos y fotos en los que se ve a grupos armados por el Gobierno que dispararon contra jóvenes que probablemente lo único que tenían era una piedra". "Usted no dispersa una manifestación a plomo", ha subrayado.

Capriles ha considerado que "ayer quedó demostrado que a este Gobierno no le importa la vida de los venezolanos". "Es una lucha, es una resistencia, pero para que doblegue al que tiene el poder tiene que ser mucho más grande", ha dicho, de acuerdo con 'El Nacional'.

Ayer, tanto la oposición como el oficialismo salieron a las calles para celebrar el Día de la Juventud, en medio de las críticas por la violenta represión de las manifestaciones estudiantiles por parte de las fuerzas de seguridad en los últimos días.

En Caracas, cientos de personas marcharon lideradas por el movimiento estudiantil y por destacados dirigentes opositores, como Capriles, Leopoldo López, y Antonio Ledezma, para denunciar los abusos del Gobierno.

Al mismo tiempo, el jefe de Estado encabezó otra marcha en Caracas en la que denunció el "rebrote en Venezuela una corriente nazi, fascista, que quiere llevar al país a la desestabilización".

Aunque en un principio las marchas transcurrieron pacíficamente, al término de las mismas un grupo de estudiantes que se dirigía a la Fiscalía para exigir la liberación de sus compañeros detenidos fue interceptado por un grupo de choque pro gubernamental.

De acuerdo con las grabaciones y con los testimonios, se produjo un tiroteo en el marco del cual un policía y un estudiante murieron, mientras que varios resultaron heridos. La Fiscalía ha confirmado tres fallecidos y 66 lesionados y ha anunciado la detención de 70 personas.

El Gobierno ha acusado directamente a López de orquestar los enfrentamientos frente a la sede del Ministerio Público y ha ordenado su captura como "autor intelectual". El líder opositor ha restado importancia a las amenazas y ha instado a "marchar con irreverencia".