Incidente aéreo
Un caza ruso Su-27 intercepta dos bombarderos B-1B de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en el Báltico
El Pentágono asegura que la interacción entre las aeronaves fue "segura" y "profesional"
La agencia rusa Ria Novisti ha informado de un nuevo incidente aéreo que involucra a Estados Unidos y Rusia. Los hechos remitidos señalan que un avión de combate ruso, modelo Su-27, ha interceptado este martes por la tarde dos bombarderos B-1B de la Fuerza Aérea de Estados Unidos sobre aguas del mar Báltico, cerca de la frontera rusa.
De acuerdo con Moscú, las dos aeronaves estadounidenses "han ocupado la zona de vigilancia aérea" de Rusia y, tras su retirada, el caza Su-27 ha regresado también de vuelta a su aeródromo base, según informa la agencia rusa de noticias Interfax.
En los últimos meses, el Mar Báltico ha sido testigo de varias situaciones similares: aviones rusos, estadounidenses y de la OTAN se interceptaron entre sí. La tensión creció entre ambas partes el pasado mes de marzo, cuando un caza Su-27 colisionó con un drone Reaper estadounidense en el Mar Negro provocando la caída al mar del avión no tripulado del Pentágono. Unos días después, un caza ruso interceptó dos bombarderos nucleares estadounidenses B-52 sobre el mar Báltico.
Las autoridades rusas dijeron que "el vuelo del caza ruso se llevó a cabo en estricta conformidad con las normas internacionales para el uso del espacio aéreo. No se han permitido violaciones de la frontera estatal de la Federación Rusa".
El Su-27 Flanker es un caza bimotor de la época de la Guerra Fría, y tiene el mismo tamaño que el F-15 Eagle. Fue diseñado como rival directo de los cazas de cuarta generación estadounidenses, con un largo alcance de 3.530 km, armamento pesado, aviónica sofisticada y una gran agilidad. En la mayoría de los casos, el Su-27 realiza misiones de superioridad aérea, pero también está preparado para realizar casi cualquier operación de combate. El aparato diseñado por la corporación Sukhoi puede llevar armas convencionales y armamento nuclear táctico. La variante más moderna, el SU-27SM, brinda una cobertura superior para aviones de ataque y bombarderos, así como para helicópteros de combate.
El portavoz del Pentágono, el general Pat Ryder, ha señalado en rueda de prensa que la interacción entre el caza ruso y los dos bombarderos fue "segura" y "profesional". "Estábamos realizando maniobras planificadas previamente", ha sentenciado.
Esta no es la primera ocasión en que Rusia confirma la intercepción de aviones de combate de potencias extranjeras, normalmente aliados de Ucrania, sobrevolando las inmediaciones de su frontera.
Tampoco es el primer encontronazo entre aeronaves rusas y estadounidenses, pues ya a mediados de marzo un caza de la Fuerza Aérea rusa impactó contra un vehículo aéreo no tripulado de Estados Unidos sobre aguas internacionales del mar Negro.
Aquel episodio supuso una nueva escalada de las tensiones entre Washington y Moscú en el marco de la guerra en Ucrania, iniciada por orden del presidente de Rusia, Vladimir Putin, a finales de febrero de 2022.
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