Nairobi

Cinco muertos por una explosión en un mercado de Nigeria, segundo atentado del día

Una fuerte explosión ha sacudido hoy por la tarde el mercado central de la ciudad de Bouchi, en el noroeste de Nigeria, y causado, al menos, cinco muertos, según confirmó la Policía. Esta localidad se encuentra a 150 kilómetros de Gombe, donde esta misma mañana murieron 20 personas por la explosión de un coche bomba en una estación de autobuses supuestamente detonado por el grupo terrorista Boko Haram.

La explosión en Bouchi, capital del estado homónimo, se produjo sobre las 17.30 horas (16.30 GMT), mientras los comerciantes se preparaban para el cierre de sus establecimientos.

Ocurrió en un lugar muy próximo al puesto policial que hay en el interior del recinto, según testigos citados por los medios nigerianos, que aseguraron que hay al menos 15 fallecidos.

Este segundo atentado tuvo lugar unas cinco horas después del registrado en la estación de autobuses de Gombe, en la que se contabilizaron 50 heridos graves además de los 20 muertos.

En el momento de la explosión, que según diferentes fuentes podría haber sido causada por una suicida, la estación se encontraba repleta de pasajeros que se disponían a viajar a sus lugares de origen para pasar las fiestas navideñas.

A pesar de que nadie ha reivindicado estos ataques, todo apunta a que son obra del grupo islamista nigeriano Boko Haram, que hoy mismo advirtió de que habrá "más derramamiento de sangre".

Esta sería la segunda vez en menos de dos meses que Gombe sufre un atentado, ya que el pasado 31 de octubre otra explosión dejó al menos 30 muertos en otra estación de autobuses de la ciudad.

A menos de dos meses para las elecciones presidenciales, que se celebrarán el próximo 14 de febrero y, según analistas, registrarán la participación más elevada de los últimos años, Boko Haram ha intensificado su campaña de terror contra varios estados del noreste del país, donde se calcula que controla el 20 % del territorio.

El grupo radical, que mantiene secuestradas a más de 200 niñas desde el pasado mes de abril, ha asesinado a 12.000 personas en los últimos cinco años, 3.000 de ellas solo en 2014, según las autoridades nigerianas.