Defensa

Confirmado por la inteligencia surcoreana: Rusia le ha dado a Corea del Norte la tecnología para crear el arma definitiva

Moscú podría haber pagado el apoyo de Pyongyang en la guerra de Ucrania con la pieza más codiciada por el régimen norcoreano: tecnología para construir submarinos nucleares, según la inteligencia de Corea del Sur

El submarino ruso Belgorod
El submarino ruso BelgorodMarina rusaMarina rusa

La cooperación militar entre Rusia y Corea del Norte podría haber alcanzado una nueva y alarmante dimensión. Según informes de la inteligencia militar de Corea del Sur, Moscú habría suministrado a Pyongyang tecnología clave para el desarrollo de submarinos de propulsión nuclear durante la primera mitad de este mismo año. Este movimiento representaría un salto cualitativo en las capacidades armamentísticas del régimen de Kim Jong Un y alteraría por completo el equilibrio estratégico en la península coreana. Este avance se enmarca en una estrategia más amplia de expansión, ya que el arsenal nuclear de Corea del Norte continúa creciendo con el objetivo de consolidar su poder disuasorio.

De acuerdo con estas informaciones, la transferencia no consistiría en un submarino completo, sino en componentes esenciales para su construcción. Se detalla la posible entrega de entre dos y tres módulos que incluirían el reactor nuclear, la turbina y los sistemas de refrigeración. Al parecer, estas piezas provendrían de antiguos submarinos rusos que ya habían sido dados de baja, lo que facilitaría una entrega discreta de material militar de naturaleza tan sensible.

Por otro lado, este presunto intercambio estratégico no sería casual. Pyongyang llevaba solicitando a Moscú esta tecnología desde el año pasado, en lo que se interpreta como una contrapartida por su continuado apoyo a Rusia en la guerra de Ucrania, una información recogida por Interesting Engineering. La colaboración entre ambos países se ha estrechado visiblemente, pero la entrega de tecnología nuclear para submarinos supondría cruzar una línea roja con profundas implicaciones para la seguridad internacional.

La vieja aspiración de Kim Jong Un

Asimismo, la obtención de submarinos nucleares es una aspiración de largo recorrido para el régimen norcoreano, ya que los considera una capacidad militar fundamental. La principal ventaja de estos sumergibles es su autonomía casi ilimitada y su capacidad para permanecer ocultos durante largos periodos, lo que les permitiría amenazar directamente a Estados Unidos y a su vecino del sur con una mayor garantía de supervivencia ante un primer ataque. Esta situación contrasta con la de su vecino, pues Corea del Sur ya compite por vender algunos de los mejores submarinos militares a nivel mundial.

En este sentido, la dependencia de la ayuda externa cobra todo el sentido si se tiene en cuenta que los servicios de inteligencia internacionales consideran que Pyongyang carece de la capacidad técnica para construir por su cuenta un reactor nuclear lo suficientemente compacto y seguro para un sumergible. Se trata de un enorme obstáculo que la ayuda rusa permitiría superar, abriendo la puerta a un escenario de tensión todavía mayor en la región.