Magreb

La confiscación de un edificio diplomático en Rabat abre otra crisis entre Marruecos y Argelia

El Gobierno marroquí justifica que el inmueble está en desuso y lo utilizará para ampliar el Ministerio de Exteriores

El rey Mohamed VI de Marruecos
El rey Mohamed VI de MarruecosPalacio Real de MarruecosAgencia EFE

El Gobierno marroquí dijo este lunes que "no busca ni escalada ni provocación" con Argelia y negó las denuncias del país vecino que acusó a Rabat de tener "un plan de confiscación" de los locales de su embajada en la capital marroquí.

Fuentes diplomáticas marroquíes dijeron a EFE que ni la embajada argelina ni la residencia del embajador, ubicadas en la avenida Mohamed VI, fueron tocadas, "no fueron objeto de ninguna medida" y están protegidas por las autoridades marroquíes.

Subrayaron que el local objeto de las denuncias de Argelia es "un edificio vacío que no se usa" y se encuentra en otro sitio aledaño a la sede del Ministerio de Exteriores marroquí, y añadieron que este local fue objeto de discusiones con las autoridades argelinas hace un año y medio para comprarlo.

"Marruecos no busca ni provocación ni escalada con Argelia e incluso el trámite relacionado con este local está en un punto muerto", afirmaron las mismas fuentes que detallaron que sobre este local desde enero de 2022 la diplomacia marroquí envió siete cartas en sus intercambios con la argelina, que contestó con otras cinco.

Añadieron que el Ministerio de Exteriores marroquí está extendiendo su sede con la adquisición de locales que tiene anexos o cercanos al edificio. Para ello, las fuentes añadieron que se han comprado locales no usados en la zona de otras embajadas cercanas como la de Austria, Suiza, Costa de Marfil y Estados Unidos, y están negociando con Dinamarca para comprar un local no usado con el objetivo de ampliar la sede del ministerio e instalar una academia y un museo diplomáticos.

Las mismas fuentes añadieron que Marruecos "siempre ha trabajado para preservar la buena vecindad entre los dos estados y la fraternidad entre los dos pueblos" argelino y marroquí.

El Gobierno argelino condenó ayer, domingo, "en los términos más enérgicos" lo que calificó de "plan de confiscación" de los locales de su embajada en Rabat y afirmó que Argelia "responderá a estas provocaciones con todos los medios que considere oportunos".

Argelia y Marruecos tienen la frontera terrestre cerrada desde 1994. La tensión diplomática existente entre ambos países desde hace décadas a causa del conflicto del Sáhara Occidental se agravó en agosto de 2021 cuando Argel rompió sus relaciones con Rabat y cerró su espacio aéreo con su vecino del oeste.