Corea del Norte

Corea del Norte consiguió 2.000 millones de dólares para armas nucleares a través de ciberataques

Pyongyang recurre a «hackers» para burlar las sanciones y el lavado de dinero La ONU destapa en un informe las tácticas utilizadas por el régimen norcoreano.

Un hombre ve en una tienda de Seúl imágenes del último lanzamiento de misiles de Corea del Norte/Reuters
Un hombre ve en una tienda de Seúl imágenes del último lanzamiento de misiles de Corea del Norte/Reuterslarazon

Pyongyang recurre a «hackers» para burlar las sanciones y el lavado de dinero La ONU destapa en un informe las tácticas utilizadas por el régimen norcoreano.

Corea del Norte ganó hasta 2.000 millones de dólares a través de ciberataques a gran escala para ayudar a financiar sus programas de armas, según publicó ayer un panel de Naciones Unidas en un nuevo informe. Los hallazgos surgieron cuando Pyongyang disparó lo que se cree que son dos misiles balísticos de corto alcance la madrugada del martes, el cuarto lanzamiento de misiles en menos de dos semanas.

El informe, presentado al comité de sanciones de Corea del Norte de la ONU, acusa a Pyongyang de utilizar piratas informáticos para realizar «transferencias ilegales forzadas de fondos de instituciones financieras e intercambios de criptomonedas, lavar ganancias robadas y generar ingresos para evitar sanciones internacionales». Los investigadores dicen que esas actividades pueden ayudar a financiar el desarrollo de armas nucleares y misiles balísticos de Corea del Norte.

Los expertos dicen que el régimen de Kim Jong Un ha invertido recursos significativos en el desarrollo de una gama sofisticada de capacidades cibernéticas y una red de piratas informáticos que se han utilizado cada vez más para evadir las sanciones de Naciones Unidas y EE UU. El levantamiento de esas sanciones ha sido un objetivo importante para el líder norcoreano, Kim Jong Un, durante las negociaciones con el presidente estadounidense, Donald Trump, pero ambas partes han progresado poco. La Administración estadounidense dice que no eliminará las medidas hasta que pueda verificar que Corea del Norte haya renunciado a sus armas nucleares, mientras que Pyongyang impulsa un enfoque gradual para el alivio de las sanciones.

Corea del Norte ha expresado su descontento a la situación actual tanto a través de palabras como de acciones y disparó lo que se cree que son dos misiles balísticos de corto alcance la madrugada del martes. Los dos proyectiles no identificados fueron lanzados al mar desde la provincia de Hwanghae del Sur, según el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur. Pyongyang ha invertido mucho en su programa de armas nucleares y misiles balísticos, y los analistas dicen que las armas que Corea del Norte ha probado en las últimas dos semanas demostraron avances tecnológicos significativos nunca antes vistos. Los lanzamientos se produjeron cuando Pyongyang describió los juegos de guerra de Washington y Seúl como una «violación flagrante» de los esfuerzos por alcanzar la paz en la península de Corea, lo que refleja una falta de «voluntad política» para mejorar las relaciones.

El portavoz del Ministerio de Exteriores norcoreano dijo que la llegada de nuevos cazas furtivos F-35A de fabricación estadounidense a Corea del Sur, la visita de un submarino estadounidense de propulsión nuclear a un puerto surcoreano y las pruebas estadounidenses de misiles balísticos fueron algunos de los hechos que obligaron a Corea del Norte a continuar su propio desarrollo de armas. «Las autoridades de EE UU y Corea del Sur siguen hablando abiertamente sobre diálogo», dijo el portavoz. «Pero cuando se sientan, afilan una espada para hacernos daño». Por su parte, Trump ha minimizado los recientes lanzamientos de proyectiles, diciendo que no rompieron ningún acuerdo que tenía con Kim, pero que las conversaciones no se van a reanudar por ahora.