Brexit

«Cuanto más duro sea el "brexit", peores serán las consecuencias para España»

El reputado economista Luis Garicano teme que el divorcio final sea peor de lo que se preveía

Luis Garicano, en una imagen de archivo
Luis Garicano, en una imagen de archivolarazon

El reputado economista Luis Garicano teme que el divorcio final sea peor de lo que se preveía

El profesor de la prestigiosa London School of Economics confesó que nunca ha conocido a nadie que esté a favor del Brexit, lo cual es algo chocante ya que vive en Reino Unido. Para él, esto demuestra los “mundos aislados y diferentes” en los que viven las élites urbanas y los que residen en pequeñas poblaciones rurales.

Garicano argumentó durante una conferencia organizada por la fundación Rafael del Pino que los partidarios de la salida de la Unión Europea vendían una “recuperación de control” a los que tenían una “sensación de que estaban perdiendo el control de su vida”. Según el catedrático, tal aspiración puede hacer peligrar unas exitosas negociaciones en áreas cruciales que garanticen el libre comercio, ya que muchos británicos no están dispuestos a ceder soberanía.

La continuidad de Reino Unido en el mercado único es lo que más le preocupa. “El obstáculo clave es la jurisdicción del Tribunal Superior de Justicia europeo porque es necesario para el mercado único”, argumentó, ya que “no se puede tener un mercado único con reglas diferentes”. Si no se ha llegado a un acuerdo sobre este tema en marzo de 2019, se producirá una ruptura que devolverá a Reino Unido a las reglas de la Organización Mundial del Comercio y se establecerán controles rígidos sobre los bienes de comercio. Esta posibilidad le parece “una locura”.

Subrayó que “cuanto más duro sea el Brexit, peores serán las consecuencias para España”. En el ámbito de la libre circulación de personas, los riesgos para los ciudadanos británicos y españoles son altos. Se calcula que hay un millón de británicos viviendo al menos temporalmente en España y 300.000 españoles en Reino Unido. El impacto, por ejemplo, en su acceso a tratamiento médico podría ser durísimo si no se llega a un acuerdo que garantice la seguridad de estas personas. Para Garicano, el Gobierno británico “está jugando con la vida de las personas” al utilizar estas cuestiones como una moneda de cambio en las negociaciones.

En el tema del comercio, aseguró que España “tiene mucho que perder”, ya que nuestro país tiene un superávit del 1% del PIB en el balance comercial con Reino Unido. Además, es nuestro cuarto mercado exterior, con un 7% del total de las exportaciones. En cuanto al turismo, vienen a España dieciséis millones de británicos cada año, creando un riesgo enorme para el sector si el Brexit dificulta su llegada.

En la libertad de capitales, la integración es muy fuerte. Reino Unido es el principal destino de inversión directa desde España. Hay operaciones existentes muy potentes. Ferrovial, por ejemplo, es propietario de Heathrow, el aeropuerto más grande de Inglaterra. Los bancos Santander y Sabadell tienen una presencia muy importante en el país, que hace de España el segundo mayor inversor en productos financieros en Reino Unido después de Estados Unidos. Empresas británicas inversoras en España también convierten al país anglosajón en el quinto mayor inversor extranjero en España. Para Garicano, España y Reino Unido llevan 40 años quitando barreras, y el temor es que “de repente estas barreras se volviesen a alzar radicalmente”.

Por último, argumentó que si los británicos quieren que Gibraltar siga perteneciendo al mercado único, se les debe ofrecer la cosoberanía. No como exigencia, sino como la única manera de que Gibraltar se mantenga en la zona de libre comercio si Reino Unido decide salirse de ella.