Pakistán

Dos nuevos muertos en la ola de saqueos a tiendas de extranjeros en Sudáfrica

Otras dos personas han muerto en las últimas horas en antiguos guetos negros, conocidos como "townships", de Johannesburgo, durante nuevos saqueos a tiendas regentadas por extranjeros, informó hoy la Policía en su cuenta de Twitter. Una oleada de actos de pillaje en negocios de inmigrantes de otros países africanos la semana pasada en Soweto y otros guetos de la capital económica de Sudáfrica causó cuatro muertos y más de 170 detenidos, que han empezado a comparecer en los tribunales.

Los saqueos se desataron el lunes, después de que un tendero somalí matase de un disparo a un adolescente sudafricano que intentaba robar en su tienda junto con otros vecinos. Según las primeras informaciones, las dos nuevas víctimas murieron anoche al recibir disparos de bala mientras intentaban saquear un comercio de un somalí en el barrio de Langlaagte, en el sur de Johannesburgo. La Policía cree que los disparos procedían del grupo de saqueadores.

"Durante la confusión se efectuaron disparos y los dos varones murieron", dijo el portavoz policial Solomon Makgale, citado por la agencia local de noticias Sapa. También en Langlaagte, un colmado fue incendiado por supuestos saqueadores. En el norte de la ciudad, en el deprimido barrio de Alexandra, grupos de vecinos han intentado saquear otra tienda e incendiado un segundo comercio.

Pese a estos últimos incidentes, la situación en Soweto y otros "townships"se ha calmado este fin de semana, tras cinco días de tensión y grandes despliegues policiales. Mientras tanto, los comerciantes extranjeros de Soweto, sobre todo somalís, han abandonado la zona para buscar protección en otros lugares de Johannesburgo, después de haber perdido en muchos casos todo su género en los pillajes. El gobernador de la provincia de Gauteng -donde se encuentra Johannesburgo-, David Makhura, se ha reunido con centenares de estos comerciantes para ofrecerles protección y asegurarles que son bienvenidos en Sudáfrica.

Inmigrantes de Somalia, Etiopía o Pakistán regentan buena parte de los negocios que operan en los "townships"sudafricanos, donde las tasas de desempleo entre los jóvenes superan el 50 %. Acusados a menudo de quitar el trabajo a los lugareños y de no tener los papeles en regla, los extranjeros son víctimas frecuentes de pillajes y ataques xenófobos.

El peor episodio de violencia contra extranjeros que ha vivido Sudáfrica en su historia reciente ocurrió en 2008, cuando más de 50 personas, en su mayoría inmigrantes, fueron asesinadas en episodios xenófobos.