Drones contra el balneario de Sochi: Zelenski responde con un ataque simbólico en la joya turística de Putin

Dos mujeres murieron y otras once personas resultaron heridas a causa de un ataque anoche con drones contra el balneario ruso de Sochi, a orillas del mar Negro, informó hoy el gobernador de la región de Krasnodar, Veniamín Kondrátiev.

"Anoche la región de Krasnodar fue sometida a un ataque masivo. En el distrito Adler de Sochi murieron dos mujeres", escribió la máxima autoridad regional en su canal de Telegram, informa Efe.

Según los servicios de emergencia, las dos mujeres fueron alcanzadas por los fragmentos de un dron derribado por las defensas antiaéreas rusas.

"Como resultado del ataque, once personas resultaron heridas, cuatro fueron hospitalizadas, incluido un agente de la policía de tránsito que será trasladado en ambulancia aérea al hospital regional", señaló el gobernador.

El Ministerio de Defensa de Rusia informó a su vez de que en la noche de ayer y primeras horas de la madrugada las defensas antiaéreas derribaron 39 drones de ala fija sobre la región de Krasnodar y los mares de Azov y Negro, que la bañan.

"Ha sido un ataque terrorista dirigido expresamente contra civiles. Eligen claramente a personas desarmadas que trabajan, que realizan sus actividades cotidianas", afirmó la portavoz de la diplomacia rusa, María Zajarova.

El ataque de anoche coincidió con la celebración en la ciudad turca de Estambul de la tercera ronda de negociaciones directas entre Rusia y Ucrania, que concluyó sin avances. Paralelamente, Moscú ha lazando un ataque masivo contra la ciudad de Odesa.

Kiev pide un alto el fuego inmediato para poder profundizar en las negociaciones para poner fin a la guerra, pero Rusia rechaza declarar esta tregua y exige abordar antes las cuestiones de fondo del conflicto.

Un balneario con mucha historia

El ataque ucraniano no tiene relevancia en el curso de la guerra, pero sí mucho simbolismo por lo que representa el objetivo alcanzado. Sochi está situado a orillas del mar Negro y es uno de los balnearios más emblemáticos de Rusia, con una historia que se remonta a principios del siglo XX.

Ha sido lugar de recreo, con igual entusiasmo, por zares, nobles, aristrócratas y jerarcas soviéticos, que han valorado sus propiedades como destino de salud y descanso. De hecho, fue la élite comunista quien más contribuyó a su desarrollo con la construcción de sanatorios monumentales como el “Rodina” y el “Ordzhonikidze”.

Las aguas termales y los tratamientos con lodo fueron sus principales atractivos, que Rusia ha seguido explotando hasta lo que es ahora, un destino turístico moderno y lujoso. Su fama ganada a pulso se reforzó con la celebración de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014. En sus complejos hay una perfecta combinación de balnearios, resorts de lujos y playas.