Elecciones en Colombia

Duque promete gobernar «sin odios» y contra la corrupción en Colombia

«La paz que añoramos tendrá correcciones», dice el ganador de las elecciones sobre el acuerdo con las FARC

Iván Duque se convirtió el domingo en el segundo presidente más joven de la historia de Colombia. En la imagen, celebra la victoria con sus seguidores en Bogotá / Reuters
Iván Duque se convirtió el domingo en el segundo presidente más joven de la historia de Colombia. En la imagen, celebra la victoria con sus seguidores en Bogotá / Reuterslarazon

«La paz que añoramos tendrá correcciones», dice el ganador de las elecciones sobre el acuerdo con las FARC.

El candidato derechista Iván Duque, delfín del senador y ex presidente Álvaro Uribe, prometió ayer tras confirmarse su triunfo en las presidenciales, gobernar sin odios ni represalias con la intención de unir a los colombianos. Duque venció cómodamente el domingo con diez puntos de ventaja sobre el candidato de izquierdas Gustavo Petro. Un vez más, los colombianos apostaron por lo seguro, por el hombre fuerte, por la derecha. La preguntara es: ¿qué hará Duque con tanto poder?

Con su sólido triunfo, el presidente electo podrá gobernar a sus anchas una Colombia amenazada por el narcotráfico, en tensión con Venezuela y fracturada por un histórico pacto de paz. Más de diez millones de electores apoyaron el regreso de la derecha conservadora al poder en la figura de este abogado que, con apenas cuatro años en el Senado, ascendió a hombros de Uribe, quien gobernó entre 2002 y 2010. A partir del 7 de agosto, cuando asumirá el cargo, Duque y su bancada mayoritaria se enfrentarán a varios desafíos tras ocho años de férrea oposición al Nobel de la Paz Juan Manuel Santos.

Una de las grandes incógnitas es qué ocurrirá con el proceso de paz. En sus primeras palabras como presidente electo, dijo: «Esa paz que añoramos, que reclama correcciones, tendrá correcciones para que las víctimas sean el centro del proceso para garantizar verdad, justicia y reparación». Ante cientos de seguidores, Duque afirmó su deseo de «pasar la página de la polarización, no voy a gobernar con odios, no tengo en mi corazón represalias». «Nuestra bandera –añadió– será la lucha contra la corrupción, la politiquería y el clientelismo, acogemos las propuestas presentadas en el Congreso en la consulta anticorrupción, pero iremos más allá, vamos a gobernar con transparencia y eficacia y vamos a devolverle a los colombianos la esperanza», añadió el dirigente.

Duque ganó en parte gracias al respaldo que le han dado algunos aspirantes caídos en primera vuelta, un apoyo que tendrá que mantener para gobernar con el favor de las dos cámaras del Congreso. El partido del nuevo presidente, el Centro Democrático, obtuvo el respaldo de una parte del Partido Conservador del también ex presidente Andrés Pastrana, del que forma parte la vicepresidenta electa, Marta Lucía Ramírez. Estas dos formaciones juntas son la segunda fuerza política en el Congreso, sólo por detrás del hasta ahora bloque gubernamental, formado por el Partido de la Unidad Nacional, el Partido Liberal, Cambio Radical y Opción Ciudadana. Duque podría ganarse el apoyo del Partido Liberal y de gran parte de Cambio Radical y de la Unidad Nacional para fraguar así una mayoría sólida que le permita sacar adelante su programa electoral sin grandes dificultades.