Estados Unidos

Tsarnaev pide perdón por el ataque de Boston antes de su condena a muerte

Imagen de archivo de Dzhokhar A. Tsarnaev, en tiempos de estudiante en el instituto
Imagen de archivo de Dzhokhar A. Tsarnaev, en tiempos de estudiante en el institutolarazon

Aunque se lo dijo a las víctimas, su mirada la dirigía al juez. Le costó mantener la compostura. El terrorista de la maratón de Boston de 2013, el checheno Dzhokhar Tsarnaev, de 21 años, pidió ayer perdón a las víctimas y sus seres queridos por primera vez desde que fuera detenido y su posterior juicio. «Lo siento por las vidas que me he llevado, por el sufrimiento que os he causado, por el daño que he hecho, el irreparable daño», indicó Tsarnaev con unas palabras con acento ruso que sirvieron para romper un silencio de más de dos años.

Después de la intervención de Tsarnaev de cinco minutos, vino la del juez del distrito George O’Toole, que escogió una cita de «La tragedia de Julio César» de William Shakespeare: «El mal que los hombres hacen vive después de ellos. El bien muchas veces queda sepultado con sus huesos». «Así será con Dzhokhar Tsarnaev», prosiguió el juez, que apuntó que nadie se acordará del cariño de sus profesores, el aprecio de sus amigos o su compasión con los discapacitados. «Lo que recordaremos es que asesinó a gente inocente de forma intencionada», apuntó antes de sentenciarlo a la pena capital.

Sin condena del terrorismo

La disculpa vino después de que durante tres horas Tsarnaev escuchase sin apenas inmutarse a 24 víctimas y supervivientes del atentado. Unos le llamaron cobarde. Otros mostraron repulsa por el terror que sembró. Algunos le pidieron que mostrase remordimiento por lo cometido. «No tiene alma», afirmó Karen Rand McWatters, que perdió una pierna en el ataque y a su amiga Krystle Campbell. La madre le miró fijamente: «Me da asco lo que le hiciste a mi hija».

A pesar de las disculpas, nadie mostró duda de lo que iba a suceder ayer. Tsarnaev será ejecutado por inyección letal. En cambio, la fiscal del distrito, Carmen Ortiz, echó de menos que no condenase el terrorismo: «Hay cosas importantes que no ha dicho».