Ankara

El caro e ilegal nuevo palacio presidencial de Erdogan

La construcción del nuevo palacio presidencial de Turquía, al que se mudará próximamente en Ankara el presidente, Tayyip Recep Erdogan, cuesta cerca de 500 millones de euros, casi el doble de lo pensado hasta ahora, según reconoce el Gobierno turco, informa hoy la prensa local.

La prensa turca había informado en las últimas semanas de que el coste estimado era de entre 250 y 275 millones de euros.

Según informó anoche en el Parlamento el ministro de Finanzas, Mehmet Simsek, hasta ahora el Estado se ha gastado unos 344 millones de euros en el palacio, el resto se hará en los próximos años, informa el diario "Hürriyet"hoy.

El Ak Saray ("Palacio Blanco") ha causado una enorme polémica en el país eurasiático, no sólo por su carácter ostentoso, con mil habitaciones, sino también porque se ha edificado a expensas de una zona verde protegida.

El Ejecutivo hizo caso omiso de una orden de suspensión de las obras, dictaminada por un tribunal tras una denuncia ciudadana, y el propio Erdogan declaró públicamente que la construcción continuará al margen de lo que dijeran los jueces.

El Colegio de Arquitectos de Ankara ha hecho un llamamiento a todos los políticos a no participar en recepciones en el nuevo palacio, dado que esto "legitimaría"un "palacio ilegal".

Aunque la residencia ya está lista, su inauguración, prevista para el pasado 29 de octubre, Día de la República, fue aplazada debido al accidente minero de Ermenek en el sur del país, donde 18 obreros han quedado atrapados bajo un alud de agua y fango.

Al gasto del palacio se añade la compra y el acondicionamiento del avión presidencial que ya se está utilizando, pero que aún no se ha pagado, y que se tasa en 146 millones de euros.

Vea las imágenes del nuevo palacio