África

Pretoria

El cuerpo de Mandela, recibido con júbilo en su aldea, Qunu

El avión con los restos de Nelson Mandela llegó hoy poco después de las 13.30 hora local (11:30 GMT) al aeropuerto de Mthatha, ciudad situada a 30 kilómetros de Qunu, la aldea en la que creció y donde será enterrado mañana.

Los restos mortales de Nelson Mandela llegaron hoy a su pueblo de Qunu, en el sureste de Sudáfrica, donde fueron recibidos por cientos de personas y donde el expresidente sudafricano será enterrado mañana.

El cortejo fúnebre -saludado por miles de personas durante el trayecto desde el cercano aeropuerto de Mthatha- arribó a Qunu a las 15:56 hora local (13:56 GMT) escoltado por un largo convoy de efectivos de las fuerzas de seguridad.

El avión con los restos de Nelson Mandela llegó hoy poco después de las 13.30 hora local (11:30 GMT) al aeropuerto de Mthatha, ciudad situada a 30 kilómetros de Qunu, la aldea en la que creció y donde será enterrado mañana.

El avión militar Hércules C-130 que transportó el féretro de Mandela tocó tierra una media hora antes de lo previsto, tras salir a las 11.58 hora local (09:58 GMT) de la base militar aérea de Waterkloof, cerca de Pretoria, donde fue despedido por su partido, el gubernamental Congreso Nacional Africano (CNA).

La aeronave fue recibida con gritos de júbilo por una multitud que le esperaba en el aeropuerto, donde una guardia de honor dio la bienvenida a los restos de Mandela.

Una procesión con el féretro del expresidente recorrerá la distancia entre Mthatha (Provincia del Cabo Oriental, en el sudeste del país) y Qunu, donde el clan Thembu del expresidente oficiará una ceremonia tradicional.

Decenas de personas esperan entre danzas tradicionales el féretro del héroe sudafricano en Qunu.

"He venido desde cerca de la ciudad de East London, a unas tres horas, porque quiero rendir mi último tributo a Nelson Mandela", dijo a Efe la joven Lungelo Magengelwa, enfundada en una camiseta amarilla con el rostro del expresidente.

"Es un momento muy emocionante, estoy a punto de llorar", añadió Magengelwa.

Junto a ella, mujeres vestidas con atuendos tradicionales xhosa -la etnia mayoritaria en la zona y a la que pertenecía también Mandela- bailan y cantan canciones en su idioma en recuerdo de su vecino más ilustre.

Mientras tanto, los organizadores del funeral de Estado que se oficiará mañana en Qunu reparten banderas a quienes ocupan, a la altura de la localidad, los márgenes a ambos lados de la carretera N2, por la que llegará el cortejo fúnebre.

Unos 4.000 personas, entre ellas una veintena de mandatarios internacionales y dignatarios como el Príncipe de Gales, asistirán este domingo al funeral del expresidente sudafricano.

Nelson Mandela falleció el pasado 5 de diciembre a los 95 años rodeado de su familia en su casa de Johannesburgo, tras una larga convalecencia por problemas respiratorios.

La aldea de Qunu, donde mañana será enterrado Nelson Mandela, se prepara para recibir el féretro de su vecino más ilustre en medio de un fuerte dispositivo de seguridad que no permite a los foráneos adentrarse en el poblado. El cuerpo del expresidente sudafricano se espera que llegue en torno a las 14.00 hora local (12.00 GMT) al aeropuerto de Mthatha, ciudad situada a 30 kilómetros de la aldea en la que Madiba (como se conoce popularmente a Mandela) pasó su infancia y en la que pidió ser enterrado.

En esta ciudad habrá un cortejo fúnebre que recorrerá las principales avenidas, que se encuentran cortadas al tráfico desde primera hora de la mañana, y donde miles de jóvenes están preparando una cadena humana que bordeará todo el recorrido, según los organizadores.

"Estamos aquí para honrar a nuestro gran padre", dijo orgullosamente a Efe Akona Bantom, uno de los voluntarios que formarán parte de esta cadena por la ciudad, donde el sepelio se ha convertido en un lucrativo negocio para el sector hotelero, con precios que quintuplican las tarifas habituales y alojamientos ilegales.

El camino entre Mthatha y Qunu es un continuo tránsito de vehículos policiales y oficiales.

También hay decenas de personas haciendo autoestop y centenares de periodistas apostados en la cunetas para grabar el paso del vehículo que transportará el féretro del líder sudafricano.

Los carteles con el rostro de Mandela y el emocionado agradecimiento de un pueblo son una constante

Una vez llegado a Qunu, la Policía impide adentrarse en el poblado o continuar por la carretera que pasa junto a los terrenos donde será enterrado, funeral al que ni siquiera muchos de los vecinos podrán asistir.

"No podemos ir al entierro, no estamos invitados, pero queremos que Mandela descanse en paz, y desde aquí mandamos todo nuestro apoyo a su familia", cuenta a Efe Cynthia Xala.

Sobre Qunu vuelan tres helicópteros y seis aviones militares en perfecta formación esperando la llegada de Madiba, que mañana ya descansará en paz.