El Estado de Derecho

–¿Está de acuerdo con el fallo de la Justicia israelí sobre la actuación del soldado Elor Azaria en Hebrón?

–Respaldo sin fisuras las decisiones de la Justicia israelí. Un tribunal militar ha hallado a este soldado culpable de homicidio, pero defendería también la decisión del tribunal si hubiera sido la contraria. No ha sido un fallo fácil. Asimismo, esta conclusión demuestra que la Justicia en Israel sí funciona a pesar de la polémica que pueda desepertarse a su alrededor. Se actuó en base a Derecho y a un proceso que ha contado con todas las garantías.

–¿Por qué la decisión de la Justicia ha provocado esa división en la sociedad israelí?

–Obviamente, el caso genera mucha polémica por las circunstancias en las que se vivió este acontecimiento, en plena «intifada de los cuchillos». Terroristas que atacaban a ciudadanos inocentes israelíes y eso genera situaciones de opinión pública complejas. Es comprensible, por tanto, que la actuación del soldado hacia el terrorista palestino genere opiniones diversas dentro de la población. En cualquier caso, defiendo que el fallo sea acatado como ocurre en un Estado de Derecho como el de Israel.

–¿Qué respondería a aquellos que consideran que el fallo debilita al Ejército israelí en su lucha contra el terrorismo?

–Si la sentencia hubiera sido al revés, habría dicho exactamente lo mismo.

-¿Hay límites en la lucha contra el terrorismo?

-Sí, es un dilema al que se están enfrentado las sociedades occidentales. Hasta dónde llega la obligación del Estado de procurar la seguridad de sus ciudadanos y de proteger las libertades indiviudales y dónde esta intersección se vuelve compleja. Hay, por lo tanto, un momento donde se pueden dar situaciones grises, donde el Estado debe decidir si la seguridad está por encima de las libertades individuales.

*Profesor en la Facultad de Relaciones Internacionales en la Univ. Externado de Colombia y analista en Oriente Medio