Bélgica

El Gobierno belga nombra nuevos ministros de Finanzas y viceprimer ministro

El presidente del Gobierno de Bélgica, el socialista Elio Di Rupo, nombró hoy a los sustitutos del dimitido viceprimer ministro y titular de Finanzas, Steven Vanackere, quien presentó la renuncia tras verse involucrado en un escándalo financiero.

El rey Alberto de Bélgica aceptó la dimisión de Vanackere. según un comunicado de la Casa Real, que informa de que el nuevo ministro de Finanzas y de Desarrollo, así como responsable de la Función Pública es Koen Geens, quien prometerá o jurará su cargo en unas horas.

El nuevo viceprimer ministro belga será el actual ministro de Defensa, Pieter De Crem, mientras que Servais Verherstraeten, actualmente secretario de Estado para Reformas Institucionales y de la Red de Edificios Públicos, se hará cargo de Desarrollo, como adjunto del ministro de Finanzas.

Vanackere (CD&V, democristianos flamencos) presentó hoy su dimisión, después de haberse visto afectado por un escándalo político sobre un acuerdo financiero entre ACW, la sección flamenca del Movimiento Obrero Cristiano, y el banco Belfius, filial belga del nacionalizado grupo Dexia.

En enero pasado Belfius adquirió por 110 millones de euros las participaciones de esas dos organizaciones en Belfius Assurance y Belfius Banque.

"El ministro de Finanzas mintió este fin de semana en el plató (de la cadena de televisión pública flamenca) VRT. Afirmó que el administrador de Belfius, Wouter Devriendt, no pertenecía a su gabinete. Doce horas mas tarde confirmó que Devriendt tenía una oficina y una dirección de correo electrónico en su gabinete", publicó hoy el diario francófono Le Soir.

Vanackere, en su declaración al presentar la dimisión, afirmó que "en los siete años que he sido ministro, me he dedicado a ejercer mi mandato de forma cuidadosa y concienzudamente, respetando las reglas de esta alta función".

También reiteró haber ejercido su función de manera imparcial y en base a su pertenencia al movimiento de la democracia cristiana.

Con anterioridad Vaneckere indicó que no estaba al tanto del acuerdo financiero entre ACW y Belfius, pero el rotativo flamenco De Morgen publicó que la Sociedad Federal de Participaciones e Inversiones le envió dos cartas con los detalles de ese pacto.

Según la agencia Belga, en el centro de la polémica en torno a ese caso está que en la operación se fijara un tipo de interés del 1,5 % "entregado discretamente sobre una base del 6,25 % para remunerar un depósito a diez años del movimiento obrero", lo que algunos partidos, como el independentista flamenco N-VA, consideraron muy elevado.

La pasada semana los nacionalistas flamencos emitieron un comunicado en el que acusaban a Vanackere de "engañar al contribuyente".

Por su parte, el presidente del consejo de dirección de Belfius, Jos Clijsters, señaló la pasada semana que el acuerdo con ACW "era muy ventajoso"también para el Estado belga y el contribuyente, publicó Le Soir, y en audiencia parlamentaria, declaró que Vanackere "no intervino en ningún momento"en las negociaciones.