El Cairo

El Primer ministro de Mursi propone una iniciativa para resolver la crisis egipcia

El ex primer ministro Hisham Qandil, que ocupó el cargo durante el mandato del depuesto presidente Mohamed Mursi, propuso hoy una iniciativa para salir de la actual crisis, que incluye la liberación de los recientes detenidos políticos.

En un vídeo difundido en internet, Qandil explicó que su plan se compone de tres etapas, la primera de las cuales estipula anular los procesos judiciales abiertos desde el 30 de junio por motivos políticos y crear una comisión encargada de visitar a Mursi.

Desde el golpe militar del pasado 3 de julio, Mursi se encuentra retenido por las fuerzas armadas, varios dirigentes islamistas han sido arrestados y la Fiscalía ha emitido ordenes de detención contra otros, entre ellos el líder de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badía. Qandil señaló que también deben cancelarse las órdenes de congelación de fondos dictadas contra responsables islamistas y crear una comisión para investigar los disturbios de este mes frente a la sede de la Guardia Republicana y la plaza Renacimiento, en El Cairo, donde murieron decenas de seguidores de Mursi.

El exjefe de Gobierno pidió, además, que se rebajen los ataques recíprocos en los medios de comunicación y se eviten las marchas de protesta por las ciudades, limitando las manifestaciones a lugares determinados.

La iniciativa de Qandil llega la víspera de multitudinarias manifestaciones de los partidarios y detractores de la destitución de Mursi, a las que han llamado las Fuerzas Armadas y los Hermanos Musulmanes, respectivamente.

En cuanto a la segunda etapa citada en el plan de Qandil, prevé llegar a acuerdos sobre "principios generales que pueden ser elementos de negociación y de acuerdo".

El exprimer ministro pidió que se permita al pueblo pronunciarse, en un plebiscito, sobre la continuidad de Mursi y que se protejan las instituciones del Estado y se continúe en "la vía democrática".

La tercera etapa de la iniciativa se centraría en debatir los detalles de esos ejes trazados.

"Los responsables de este país tienen que escuchar todos los puntos de vista", subrayó Qandil, que recordó que fueron masivas las protestas contra Mursi, pero también lo han sido aquellas que piden su restitución en el poder.

Egipto se halla dividido entre partidarios y opositores a Mursi, que fue depuesto el pasado día 3 por el Ejército, tras las protestas multitudinarias de días anteriores que pedían elecciones presidenciales anticipadas.