Política

La Habana

El régimen cubano veta a LA RAZÓN

La Embajada en Madrid asegura que la decisión de denegar el visado a la periodista se tomó directamente en La Habana

El régimen de La Habana no tolera a la Prensa crítica en la isla
El régimen de La Habana no tolera a la Prensa crítica en la islalarazon

El régimen cubano denegó a última hora de ayer el visado de la periodista que firma esta información y le impidió el viaje previsto a la isla para cubrir el Festival del Habano. LA RAZÓN se puso ayer en contacto con la Embajada cubana en Madrid sin obtener una respuesta clara a la denegación del visado. El personal diplomático aseguró que la decisión venía directamente de La Habana, y precisaron que los procesos de solicitud de visado a los periodistas suelen alargarse. «Creo que todavía no se ha tomado la decisión», justificó ayer el jefe de la oficina de prensa de la legación cubana, Abel Derivet. No obstante, sí pudieron viajar más de «300 periodistas procedentes de más de 80 países», entre los que se encontraban varias cabeceras nacionales. Todos con el mismo propósito de cubrir el XVI Festival del Habano que se celebra desde el 24 y hasta el 28 de febrero en La Habana.

Todos los visados de los periodistas españoles fueron solicitados al mismo tiempo a la Embajada de Cuba en Madrid. Incluso el jefe de Prensa exigió el currículum actualizado de los periodistas y mantener una entrevista personal con cada uno de ellos, tras la cual redactaría un informe que remitiría al Gobierno cubano. El pasado 3 de febrero, siguiendo todas las instrucciones de la legación, esta periodista, que trabaja en la sección de Gente de LA RAZÓN, acudió a la entrevista con Abel Derivet. En un encuentro que se alargó cerca de una hora, Derivet se interesó por las ideas de la redactora, por qué temas iba a tratar a su vuelta de Cuba, por el motivo de su interés en el viaje y por cuál era la visión del régimen en este periódico. Las preguntas oscilaban entre trivialidades como el clima y las playas del Caribe y asuntos políticos. Tras el encuentro, Derivet insistió en que no iba a haber «ningún problema con la visa». Se despidió afirmando que, tras el viaje, que daba por hecho, se mantendría otra entrevista «para intercambiar pareceres»..

Todos los billetes de avión estaban comprados y las reservas de hotel cerradas hasta el giro de última hora. Dos periodistas se quedaron fuera del viaje. Las dos del mismo grupo mediático. «Se han quedado fuera LA RAZÓN y Onda Cero», confirmó Derivet a este periódico. Desde la Embajada se insiste en que «no se ha denegado» el visado, sino que simplemente «no se ha concedido aún», pese a ser conscientes de que el retraso había impedido el traslado.

Ante la discriminación informativa, este periódico se puso en contacto con la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, quien declaró que «no es sorprendente» la negativa a conceder un visado a un periodista porque «en el pasado, el Gobierno ha impedido a otros profesionales de la información la entrada al país; algunos incluso han tenido que salir en el mismo avión en el que habían entrado». A su juicio, este episodio «es una muestra más de que en Cuba nada ha cambiado». Por su parte, el presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elizardo Sánchez, explicó que «esta negativa es una señal de cuál es la disposición del Gobierno cubano a la hora de aceptar los estándares internacionales». Sánchez aseguró en declaraciones a LA RAZÓN que «Bruselas debería toma nota» ante lo sucedido y expresó su deseo de que «ahora que la Unión Europea ha dado pasos para acercarse al régimen sin que las autoridades cubanas hayan dado ninguna señal, sería positivo que Cuba mostrara un rostro más civilizado y ofrezca gestos de buena voluntad».

Éste es sólo un nuevo capítulo en la persecución a la libertad de Prensa del régimen castrista que pone en entredicho las tímidas iniciativas de apertura y flexibilización lideradadas por Raúl Castro. El pasado mes de julio, numerosos medios de comunicación se alzaron para protestar contra la restricción que sufren los periodistas en Cuba, protestas que fueron motivadas por la decisión del régimen de retirarle la acreditación a Mauricio Vicent, corresponsal de «El País» y Cadena Ser. El Centro Internacional de Prensa (CPI) decidió revocarle el permiso de servir como corresponsal en suelo cubano alegando que ofrecía «una imagen parcial y negativa de la realidad cubana». Gary Marx, corresponsal del periódico estadounidense «Chicago Tribune», Stephen Gibbs, el de la BBC, y César González-Calero, del periódico mexicano «El Universal», corrieron la misma suerte. En la actualidad, el ejercicio de la Prensa extranjera en Cuba está regulado a través de la Resolución 182 del año 2006.