Terrorismo

EE UU abate con un misil Hellfire, lanzado desde un dron, a un líder yihadista mientras hablaba por teléfono

A Khalid Abdullah al-Khulaif se le atribuyen responsabilidades de atentados en Europa

Un miembro del Estado Islámico, con la bandera del grupo terrorista
Un miembro del Estado Islámico, con la bandera del grupo terroristalarazon

El Estado Islámico (Daesh, Isis) lanza de forma continua, a través de sus redes sociales, recomendaciones y manuales sobre la utilización de los teléfonos móviles y la forma de encripar los mensajes. Son conscientes de que un mal uso ha conducido en más de una ocasión a la localización y posterior eliminación de algunos de sus cabecillas. Esto es lo que parece haberle ocurrido al jefe yihadista Khalid Aydd Ahmad al-Jabouri, al que fuentes antiterroristas norteamericanas vinculan con la planificación de atentados en Europa.

Fue abatido, con un misil Hellfire, lanzado desde un dron, en las afueras de la ciudad de Kili, en la provincia de Idlib, en Siria, mientras hablaba por teléfono. En cualquier era uno de los responsables de la banda tyihadista en la zona.

El ataque fue preciso ya que ningún civil resultó herisdo. Los socorristas que acudieron al lugar señalaron que un hombre jabía muerto enun ataque con drones el lunes en el noroeste de Siria, controlado por la oposición. Llevaron al herido al Hospital Bab Al-Hawa, donde murió..

Khalid Abdullah al-Khulaif, que probablemente habrá utilizado otros nombres, era un yihadista de alto rango de la provincia oriental de Deir al-Zour. El Comando Central de EE UU subrayó la muerte de este individuo interrumpiría temporalmente la capacidad de ISIS para planear ataques externos.

"Daesh continúa representando una amenaza para la región y más allá", dijo su comandante, el general Michael Kurilla. "Aunque debilitado, el grupo sigue siendo capaz de realizar operaciones dentro de la región con el deseo de atacar más allá de Oriente Medio". La coalición multinacional liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico ha llevado a cabo una serie de ataques en el norte de Siria en los últimos meses contra altos miembros del Estado Islámico y Hurras al-Din, la rama siria de Al Qaeda.

En la actualidad, una vez perdido el “califato” en 2019, los yihadistas tienen su base principalmente en áreas rurales y continúan llevando a cabo atentados de forma continua.