Países Bajos cierra un pacto de coalición tras un año de parálisis política

Tras un año con un Gobierno en funciones, Países Bajos anunció ayer la renovación del acuerdo de coalición entre los cuatros partidos de centro derecha que comparten el poder desde 2017. Incombustible ante las crisis, el liberal Mark Rutte repetirá como primera ministro por cuarta vez desde 2010. Tras la marcha de la canciller Angela Merkel, Rutte se convierte en el segundo jefe de Gobierno de la UE más veterano, solo superado por Viktor Orban.

Tras 271 días de intensas negociaciones, liberales de derechas (VVD), liberales progresistas (D66), democristianos (CDA) y Unión Cristiana (UC) hicieron público ayer un pacto de coalición de 50 páginas con el que esperan afrontar las reformas que necesita Países Bajos tras casi un año de parálisis política. Este «impasse» supone un récord tras los 255 días que ya fueron necesarios en 2017 para conformar un Gobierno.

Rutte y su Gobierno presentaron su dimisión el pasado enero en medio de las acusaciones falsas contra 47.000 familias de origen inmigrante solicitantes de ayudas públicas y sus 97.000 hijos, a los que la Agencia Tributaria persiguió hasta la ruina. Se trata de uno de los mayores escándalos administrativos holandeses de los últimos tiempos.

«Se ha cometido una gran injusticia para los padres afectados y sus hijos, con graves consecuencias en todas las facetas de sus vidas. Para hacerles justicia, es crucial una compensación generosa y una sanción emocional», subraya el acuerdo de Gobierno.

Asimismo, las prioridades del nuevo Ejecutivo son la vivienda, el cambio climático, la crisis del nitrógeno y la inversión en educación. En el acuerdo destacan la subida gradual del salario mínimo en un 7%, que se basará en una semana laboral de 36 horas (como proponía la izquierda desde la oposición), y se dará prioridad a resolver desafíos sociales como la lucha climática y la crisis del nitrógeno con 35.000 millones y 25.000 millones de euros adicionales, respectivamente.

Uno de los principales problemas que tiene hoy Países Bajos es la crisis de la vivienda, por lo que el futuro Ejecutivo promete construir hasta 100.000 viviendas anualmente, con al menos dos tercios destinados a alquileres asequibles y futuros propietarios que buscan primera residencia. Habrá un ministro de Vivienda y Ordenación Territorial.

Tras su presentación pública, el acuerdo de coalición se someterá hoy a la votación de la Cámara de Representantes (Cámara Baja del Parlamento), donde el cuatripartito goza de mayoría absoluta. Sin embargo, la formación del nuevo Gobierno se retrasará a enero, en concreto a la semana del 10 de enero, una vez que los socios cierren el reparto de carteras. Se prevé que el nuevo Ejecutivo sea paritario y cuente con 20 ministros y 10 secretario de Estado.