Guerra en Ucrania

El brutal bombardeo de Rusia a un hospital psiquiátrico cerca de Járkov con 330 pacientes dentro: “Algunas personas no pueden moverse”

El ataque tuvo lugar contra el Instituto Psiconeurológico de la localidad de Oskil, y provocó la destrucción de los pisos segundo y tercero

El ataque al psiquiátrico se produce apenas unos días después del bombardeo de un centro hospitalario en Mariúpol.
El ataque al psiquiátrico se produce apenas unos días después del bombardeo de un centro hospitalario en Mariúpol.AgenciasLa Razón

Un hospital psiquiátrico con 330 pacientes adentro en Járkovtambién fue atacado hoy por la mañana, según el jefe de la administración regional, Oleg Syniegubov, que en el día de ayer ya había denunciado que más de 60 hospitales y centros médicos fueron bombardeados por las tropas rusas.

El ataque ha tenido lugar contra el Instituto Psiconeurológico de la localidad de Oskil, en el centro-este del país y muy próxima al frente de combate de Lugansk, según un mensaje del Servicio Estatal de Emergencia ucraniano para la región de Járkov publicado en su cuenta de Facebook. La explosión fue causada por al menos un proyectil, y provocó “la destrucción de los pisos segundo y tercero” cuando “todo el personal de la institución y 330 pacientes (principalmente ancianos y discapacitados) estaban refugiados en el momento del ataque”.

El ataque no ha dejado víctimas, ya que las personas que se encontraban dentro estaban “en un refugio antiaéreo”.

“Si esto resultara cierto sería otro ataque contra la sanidad en Ucrania, según estas autoridades. En este lugar concreto había 300 personas, de las cuales unas cincuenta no pueden moverse”, dijo el portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tarik Jasarevic, en una comunicación por videollamada desde Leopolis, en el oeste de Ucrania. “Condenamos todos los ataques contra instalaciones sanitarias, personal de sanidad o pacientes, lo que es una violación flagrante del derecho humanitario internacional, priva a la gente de atención médica y pone en peligro la vida de pacientes y trabajadores”, comentó.

Jasarevic informó de que la OMS ha enviado cinco toneladas de suministros médicos a Kiev y varias toneladas más a ciudades del este de Ucrania, donde las hostilidades son más intensas y desde donde la organización espera la confirmación de la llegada y distribución de esta ayuda.

Según varios analistas ucranianos, británicos y estadounidenses, Rusia no logró sus objetivos iniciales y está tratando de reagruparse y cercar ciudades ucranianas clave, lo que también está ralentizando su avance. Los intentos de avance rápido han sido reemplazados por el bombardeo extensivo de las ciudades ucranianas destinado a quebrar la moral y disminuir la capacidad de defensa al dañar la infraestructura social.

El ataque al psiquiátrico se produce apenas unos días después del bombardeo de un centro hospitalario en Mariupol, donde funcionaba una sección pediátrica y una maternidad y en el que murieron tres personas y otras diecisiete resultaron gravemente heridas.

Aunque el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, aseguró ayer que ese hospital estaba siendo utilizado como base de combatientes radicales, la Oficina de Derechos Humanos de la ONU confirmó que estaba operativo, e indicó que estos ataques se tratan de “actos chocantes” y que podrían considerarse como crímenes de guerra si se demuestra que se han cometido de forma indiscriminada.

Acuerdos sin avance

Estados Unidos y sus aliados se prepararon para redoblar sus esfuerzos para aislar y sancionar a Rusia, revocando su estatus de país más favorecido. Pero con la invasión ya en su 16º día, Rusia parecía estar tratando de reagruparse y recuperar el impulso, con la ampliación de los bombardeos y el endurecimiento de las ciudades ya atacadas, en particular la ciudad portuaria clave de Mariupol, donde decenas de miles de personas luchaban por encontrar alimentos bajo un intenso asedio de 10 días.

El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que hay “ciertos avances positivos” en las conversaciones entre Rusia y Ucrania, pero no ofreció detalles. El mandatario ruso recibió en Moscú al presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, para mantener conversaciones, y le dijo que las negociaciones “se celebran casi a diario” y que “hay ciertos avances positivos, según me informaron los negociadores de nuestra parte”.

Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo que las fuerzas ucranianas habían “alcanzado un punto de inflexión estratégico”, hablando en un video fuera de la administración presidencial en Kyiv “Es imposible decir cuántos días necesitaremos todavía para liberar nuestra tierra, pero sí es posible decir que lo haremos porque... hemos alcanzado un punto de inflexión estratégico”, dijo, No dio más detalles. Dijo que las autoridades estaban trabajando en 12 corredores humanitarios y tratando de garantizar alimentos, medicinas y productos básicos a la población de todo el país.